Privilegio real
El hombre de confianza de la Reina Isabel que habría reemplazado al Duque de Edimburgo
El segundo cumpleaños de Su Majestad estuvo atravesado por la fantasmagórica presencia de su exesposo.
Podríamos decir que los últimos dos años han sido muy turbulentos para la estable vida de la Reina Isabel. Por poco y el té de las 5 de la tarde desaparece tras los escándalos que su propia familia ha protagonizado. No han pasado ni 25 años del fallecimiento de Lady Di, hecho que hizo abrir más grande la lupa hacia su reinado, que ahora está en medio de otro gran torbellino.
La Reina Isabel sabe que debe hacer todo lo posible por sostener los estándares de la monarquía y la realeza europea. Ella es la mejor figura de tradición y conservadurismo de la región. Pero ahora, a sus 95 años, está atravesando uno de los momentos más vertiginosos de su reinado.
Hace pocos meses falleció el Duque de Edimburgo, su esposo y fiel acompañante. La Reina Isabel atraviesa un momento de reinvención y reconstrucción, ya que no solo partió su “media naranja”, sino que también su nieto preferido, Harry, ya no pertenece a la realeza.
Pero también es un buen momento para convocar a los aliados, esos que sí están dispuestos a sostener los valores de la monarquía a como dé lugar, a hacer lo que sea con tal de conservar los viejos pilares de una realeza innecesaria en los tiempos de ahora.
La semana pasada, por este mismo medio, hemos hablado sobre Sofía de Wessex, esposa del hijo menor de la Reina Isabel, el Conde Eduardo. Ella es una de las guardianas que vigila atentamente las necesidades de Su Majestad. Pero tiene un aliado: Eduardo, el Duque de Kent.
Eduardo de Kent es primo hermano de la Reina Isabel. Él fue quien estuvo a su lado durante la celebración del segundo cumpleaños de la Reina, tal como lo indica la tradición. Durante el “Trooping the Colour”, en español “Desfile de estandarte”, fue él quien permaneció a su lado todo el tiempo.
La vida del Duque de Kent es similar a la de Sofía de Wessex. Ambos son los candidatos perfectos para representar los valores de la monarquía. Elegancia, firmeza, cumplimiento, deber, servicio y prudencia son algunos de los valores que juntos defienden. La Reina Isabel, en esta ocasión, ha decidido elegirlo a él para que reemplazara el lugar vacío de su difunto esposo, el Duque de Edimburgo.
