Charlene de Mónaco, la Princesa triste que se refugia en el recuerdo para sobrevivir

Hace tres meses, Charlene de Mónaco decidió embarcar una expedición hacia el país de Sudáfrica para liderar una campaña solidaria contra la caza de rinocerontes. El asunto fue que la Princesa viajó con una leve infección en la zona bucal, problema que se agravó en el continente africano.

Desde ese momento Charlene de Mónaco empezó una verdadera pesadilla. Tras un fuerte dolor de oído, los médicos le recomendaron quedarse en la localidad y no viajar en avión, ya que su debilitado oído no podría superar la presión de viajar a 200 mil pies de la altura.

Todo ello ha hecho que Charlene de Mónaco se distanciara de su familia, principalmente de su esposo. Sus hijos realizan video llamadas constantemente y también, con su marido está a la espera de cumplir 10 años de matrimonio. Una unión que tenía como horizonte 5 años y que terminó por duplicarse en tiempo y en herederos. Quien sabe cuántos años más les espere juntos.

Ante tanta ausencia y esta inesperada estadía en un país cercano a sus raíces, pero lejos de los que hoy elige como familia, nos hemos interesado por saber más acerca de Charlene. Es decir, sabemos que ha sido una nadadora olímpica ejemplar que fue durante los Juegos Olímpicos que acabo por enamorarse del Príncipe de Mónaco. Pero ¿hay algo más?

Claro que sí. Pese a tener esa nula sonrisa y a llevar seguido un semblante triste, la historia de vida de Charlene de Mónaco tiene mucho que contar. Aunque hoy vive rodeada de lujos, no siempre fue así.

No teníamos electricidad, porque no podíamos pagar la factura.

Confesó en una oportunidad en relación a su infancia. Su madre era profesora de natación y su padre se dedicaba al comercio. No obstante, muchas veces vieron como las cuentas consumían sus ingresos.

Luego de haberse destacado en los Juegos Olímpicos, Charlene de Mónaco conoció a Alberto y seis años más tarde se comprometieron. El acuerdo pre nupcial establecía como mínimo cinco años de unión y al menos un heredero. Hoy la pareja tiene mellizos y están a punto de celebrar el décimo aniversario. Todo ¡por partida doble!