El acto de rebeldía de la Infanta Elena en contra del Rey Juan Carlos cuando se acerca su regreso

Si bien la Casa Real no es ningún cuento de hadas hace bastante tiempo y eso lo sabemos todos, tal vez no muchos sepan que la historia ha estado rodeada de manipulaciones no siempre tan geniales, y como siempre los Monarcas han actuado desde el machismo minimizando completamente a las figuras femeninas. Y aunque este hecho podría parecer cosa del pasado sin ir más lejos tenemos un enorme caso de misoginia en esta nueva era de realeza, lo que pasó entre el Rey Juan Carlos y la Infanta Elena.

La realidad es que la Reina de España debería ser en este momento la Infanta Elena, ella es la mayor de los hijos del Rey Juan Carlos, esto sería así si su propio padre no hubiera impuesto un artículo en la Constitución que obliga a que el hijo de más edad herede la Corona excepto si es una mujer, por esa razón es que se le cedió la jefatura de estado al hijo más pequeño pero varón, el Rey Felipe. En este nuevo caso, la Princesa Leonor sí será Reina por el momento, puesto que no tiene hermanos varones.

Pero lo que no muchos saben es que esta regla no fue puesta de manera inocente, más bien fue adrede de parte del emérito por una sola persona, la Infanta Elena. Alguna vez Jaime Peñafiel afirmó: "Juan Carlos decidió borbonear presionando a los padres de la Constitución para que mantuvieran la preferencia del varón sobre la mujer. Los motivos del Monarca eran que dudaba de la estabilidad emocional de su primogénita, la Infanta Elena, a quien no consideraba en condiciones, digamos intelectuales, para ser la heredera". 

De alguna u otra manera, consideraban a la hija mayor del Rey Juan Carlos como una persona incapacitada, las razones no serían del todo claras, aunque con el paso del tiempo podremos descubrir que ella sí se ha empeñado en que se la vea como la persona rebelde de la Familia Real, haciendo una pequeña lista diríamos que está divorciada, tiene dos hijos que jamás han estado libres de los escándalos y posiblemente su presencia siempre haya sido muy criticada, los rizos desarreglados y los cientos de tratamientos que se realizó han hecho que su cabello no sea de lo más presentable para una miembro real.

Pero,  ahora la Infanta Elena reapareció en Ávila en representación de la Fundación Mapfre para la cual trabaja con un alisado perfecto, fino y arreglado, tratando de alguna manera salvar aquella imagen y, quién dice, mostrar un poco de rebeldía ante el Rey Juan Carlos, su padre que jamás confió en ella, a pesar de que fue la única que ha estado para él junto a su hermana la Infanta Cristina en estos meses de aislamiento en Abu Dhabi y justo ahora que se habla de un pronto regreso del Monarca.

Pero aunque la Infanta Elena haya hecho todo lo posible por arreglar su cabello a pesar de haberlo tenido revuelto en tantos otros actos públicos, no ha sido suficiente está bastante dañado con el paso del tiempo y la infinidad de tratamientos. Pero más allá de eso la crítica principal es al Emérito Rey de España que ha estado de acuerdo con una causa completamente machista por el simple hecho de no querer a su propia hija en el trono; ahora bien, en estos casos es donde descubrimos que Elena es quien más se le parece al progenitor:  soberbia, amante del toreo y con un matrimonio fracasado. Pero nadie podría dejar de preguntarse cómo habría sido el país con ella como Reina y con Jaime Marichalar como Rey Consorte de España, ahora divorciados.