El impensado descuido de Tamara Falcó que pondría en peligro la herencia de Isabel Preysler

Fin de año nos está pisando los talones y para cualquiera es un buen momento de hacer un balance de lo que hemos hecho bien y mal, Tamara Falcó puede estar feliz de agradecer que este ha sido uno de sus mejores años por donde se lo mire, su última fiesta para celebrar sus 40 años ha dado muestra de que se mantiene en la plenitud máxima de su vida.

Tamara Falcó quiso celebrar por todo lo alto todos los logros que venían acompañando a sus 4 décadas, y podría decirse que ha sido un festejo propio de ella, considerado uno de los más glamorosos del otoño. Reservó los casi 1.000 metros cuadrados del Palacio de Saldaña, asistieron más de 150 invitados y también contó con la presencia de más de 50 medios que se encargaron del photocall.

Del cóctel se encargó Quique Dacosta y de la música en directo el británico Martin Joseph. La velada además sirvió para que todo el mundo confirme por fin que la sucesora de Isabel Preysler es ella ente todas sus hijas; por años le consultaron a la socialité sobre esto pero ella se llamó al silencio, aunque teniendo en cuenta la vida de las tres hermanas, Tamara Falcó, Ana Boyer y Chábeli Iglesias, los hechos hablan por sí solos.

Entre los logros de la Marquesa de Griñón de este año contamos haberse graduado como chef en la prestigiosa escuela Le Cordon Blue luego de su excelente paso por "MasterChef", publicar un libro junto con su madre "Las recetas de casa de mi madre", y ha conseguido su lugar fijo como colaboradora en "El Hormiguero" de Pablo Motos; además de que destaca su presencia como influencer y eso la corona como el fiel reflejo de Isabel Preysler.

Aunque, más allá del glamour y todos los eventos en los que brilla, Tamara Falcó tiene un par de puntos flacos de los qué ocuparse, por ejemplo de su empresa y sus primeras cuentas como Marquesa de Griñón que parecen no estar tan bien como todas sus otras actividades. La hija de Isabel Preysler gestiona todos sus proyectos a través de la empresa Gypset Living SL. La sociedad es heredera de la matriz Falcó Preysler SL, ella es administradora única y en el último tiempo han estado viviendo algunas complicaciones económicas.

Tamara Falcó vio caer de manera drástica algunos de sus activos en el último año, ha sufrido la caída de un 80 por ciento  de los mismos, desde los 106.322 euros de 2019 hasta los 19.647 euros. Pero,  no todas son malas noticias y por otro lado la aristócrata española ha conseguido reducir el capítulo de los deudores comerciales que venía arrastrando, bajándolo de 16.000 euros en 2019 hasta los 4.530 euros del último conteo.