EL TIEMPO PASA

El presente de Íñigo González a veinte años de su paso por "Gran Hermano"

Cómo vive el participante que enamoró a la audiencia del reality.
martes, 30 de marzo de 2021 · 17:25

El nuevo milenio traía más que una novedad en la televisión española. El 23 de abril del 2000, "Gran Hermano" desembarcaba en la pantalla de Telecinco y generaba un fanatismo sin igual ante un hecho nunca visto hasta el momento.

Catorce concursantes pasaron por la casa más famosa del país, que en ese momento estaba ubicada en Soto del Real. En esta primera edición, Ismael Beiro se consagró como ganador con el 41,42% del apoyo de la audiencia, pero varios concursantes han quedado en el recuerdo del público.

Iñigo González Salas entró en la casa con 23 años como reserva en la sexta gala tras el abandono de Silvia Casado y se ganó el corazón de los fanáticos por su carácter tranquilo, su famoso polo verde. 35 días le bastaron al joven de Celta para ser uno de los participantes más recordados de "Gran Hermano". 

Tras su paso por el certamen de Telecinco, su carrera fue bastante vertiginosa. El licenciado en Periodismo se desempeñó como colaborador en el programa "Crónicas Marcianas" y hasta llegó al cine con un cameo en la segunda entrega de Torrente, pero tras estos aportes mediáticos decidió alejarse de los medios, aunque mantuvo contacto con parte de sus compañeros.

Tenemos un grupo desde el año 2016 gracias al reencuentro que organizó la gran María Teresa Campos. No estamos todos, la verdad.

El exparticipante de "Gran Hermano" escribió dos libros titulados "Borrachos de fama" y "Mercenarios de la tele", en los cuales Íñigo relata el efecto que tienen los reality shows en sus participantes, con testimonios de concursantes de diversos formatos. "Muchos se convierten en muñecos rotos, caen en difíciles adicciones o les ofrecen dinero para concretar encuentros íntimos con ellos", afirmó.

Como si fuera una mente brillante, González Salas no pudo parar de estudiar y en la actualidad se encuentra viviendo de ello con gran éxito. Oficiado en varios idiomas, trabaja como profesor interino en la Escuela Oficial de Idiomas de Granada, donde afirma que en la educación ha encontrado su lugar en el mundo.