Así es la vida de Eva, la hermana de Karlos Arguiñano que se mantuvo siempre en un segundo plano

Eva y Karlos Arguiñano trabajan juntos desde hace décadas, precisamente desde el año 1976. De la mano construyeron un palacio de la gastronomía y actualmente se lucen en el programa "Cocina abierta", en donde presentan las recetas más variadas y fáciles de preparar. Pero ambos son muy distintos, mientras que él es un tanto extrovertido y llamativo, ella prefiere un perfil más reservado.

Tanto es así que si no fuera por el empresario, sus seguidores no habrían descubierto el motivo que la llevó a estar ausente de las cámaras televisivas: "Segundo plato, unos garbanzos sicilianos. Es una receta que me ha pasado mi hermana Eva, eh. Por cierto, se rompió la pierna y ha estado escayolada, pero ya va a mejor. A ver si pronto puede venir".

La vasca jamás se hubiera imaginado ser una reconocida chef, pero se podría decir que la cocina se transformó en su vida. A los 16 años debió empezar a trabajar, pues estudiar no le gustaba demasiado y tampoco pretendía hacer enfadar a su progenitora: "No era buena estudiante y, como cateaba, mi madre me mandaba a trabajar con Karlos al club de golf de Zarauz, donde él llevaba la cocina. Y luego ya empecé en su restaurante, me quedé ahí, al principio en ensaladas y luego en pastelería".

Con el tiempo la consanguínea se convirtió en la jefa de pastelería del negocio del cocinero vasco. Si bien Karlos Arguiñano fue quien le abrió las puertas al maravilloso mundo culinario, ella fue quien decidió formarse y tomó más de una centena de cursos que le sirvieron para perfeccionarse y destacarse en lo dulce.

De hecho, la oriunda de Beasáin conquistó la pantalla chica y tuvo sus propios programas: "Hoy cocinas tú" fue un espacio en La Sexta que duró desde el año 2006 al 2009. Paralelamente presentó "Las tentaciones de Eva", dedicado pura y exclusivamente a los postres. Al igual que el empresario publicó varios materiales escritos de cocina, eso sí, todos producidos por la empresa familiar.

Respecto a su vida personal, como se mencionó en líneas anteriores, la pastelera es muy discreta y reservada, pero se pudo saber de buena fuente que es divorciada y tiene dos hijos que son la luz de sus ojos. Respecto a ser reconocida como "la hermana de Karlos Arguiñano", confesó en una entrevista a "El Diario Vasco": "No me importa, lo llevo bien, con alegría. No me parece una losa: soy su hermana, y con orgullo".