Lógico o exagerado

Las exigencias que debe mantener todo Mediaset cada vez que Isabel Pantoja cruza un pasillo

Diva no se hace, se nace.
lunes, 3 de mayo de 2021 · 13:49

Todo está muy sensible desde que se desató la feroz polémica con Isabel Pantoja y su hijo Kiko. Es imposible que alguien ignore lo que pasa en su vida privada, dado que su pequeño del alma es el principal encargado de divulgar todo lo que le pasa a la diva ante la audiencia.

Sin embargo, Isabel Pantoja tenía un contrato que cumplir con Mediaset y, tal como lo exigía el previo tratado, debía ser cumplido. Fue así que la tonadillera pasó a integrar el nuevo programa “Top Star”, formando parte como jurado junto a Danna Paola y Risto Mejide.

“Socialité” reveló datos exclusivos sobre las exigencias de la diva que, como ya sabíamos, son estándares muy altos que cumplir. Su participación en este programa ha levantado la curiosidad sobre su estado anímico, como es ella con los demás y si en algún momento dice o dijo algo sobre su hijo.

Parece que Isabel Pantoja se lleva muy bien con sus compañeros de trabajo, comparte con ellos muchos momentos y lejos de lo que todos creíamos, es muy risueña y divertida. Pero no deja de poner sobre la mesa las condiciones de un trato preferencial. Pidió un trato especial hasta en la cárcel ¿por qué se privaría ahora de pedirlo siendo que tiene todo para exigir?

Un informante de “Socialité” ha revelado que la diva exige, sin discusión y firmemente, que cuando ella pase por un pasillo sea completamente despejado. Ni una sola persona puede pasar cuando sus delicados pies traspasan el lugar:

Para que Isabel Pantoja pase por un pasillo, este debe ser previamente desalojado. Deben estar vacíos para que ella los cruce y si alguien aparece mientras está ella, le piden que se detenga.

Pero de acuerdo a este informante, esto pasa por su obsesión con el coronavirus. La pandemia mundial ha trastornado la mentalidad de la tonadillera, quien incluso llega a rezar cada vez que el test le sale negativo.

Además, su peluquero y una asistente la siguen todo el tiempo, teniendo como regla inquebrantable llevar los mismos cuidados que ella. No se despegan ni un segundo y cuando lo hacen, son rápidamente sustituidos por otras personas del equipo. La soledad y ella no se llevan bien, al parecer.