DOS VIDAS EN UNA

Ona Carbonell se enfrentó a lo inesperado para alcanzar el éxito

La natación y la maternidad han sido los grandes maestros en su último tiempo.
sábado, 10 de julio de 2021 · 21:36

Ona Carbonell es una de las deportistas de alto rendimiento más importantes de España. Consagradísima como la mejor nadadora del país y líder del equipo de natación que nos representará en Tokio, la nadadora ha conversado con la revista Mujer Hoy, para compartir algunas de sus reflexiones.

La nota completa no tiene desperdicio alguno. Sin ningún tipo de limitación, Ona Carbonell reflexionó sobre el mundo del deporte, las pujas sexistas que hay dentro de él, el equilibrio que tuvo que hacer en su vida para combinar la maternidad con la disciplina y también sobre sus proyecciones a futuro.

Como dijimos, no dejó un solo tema sin tocar. En primer lugar se refirió a su rol como deportista, pero también como madre. Fue una lucha poder combinar a ambas, pero aun así se siente orgullosa de haberlo enfrentado. Curiosamente en esa búsqueda de estabilidad en ambas partes de su vida, fue que descubrió que en el deporte hay ciertos temas tabú que no han sido tratados con profundidad:

Poco se habla de que la sociedad cree que, si has sido madre, no vas a ser la misma que antes, y mucho menos en el ámbito deportivo. Da miedo tomar la decisión porque después de ser madre, se te da por perdida.

Y podemos decir que no solo pasa en el terreno deportivo, sino en muchos otros. La maternidad es vista como una celebración, pero también puede representar un obstáculo a la hora de conseguir un trabajo o alcanzar mejores puestos.

"Al principio me sentía mal, pensaba que tenía que estar con mi hijo en lugar de entrenar, pero cuando crezca, me gustará explicarle lo mucho que me esforcé por cumplir este sueño y darle tanto cariño. Mi madre, que es cirujana, me dijo que a los tres meses estaba haciendo guardia en el hospital… Y tan mal no he salido"

Compartió Ona Carbonell a Mujer Hoy. Palabras que resonaron en la fibra más sensible del feminismo, pero también ha cargado con alguna que otra crítica. Pues, lejos de lo que quizás podríamos haber imaginado, para la nadadora el acceso de los hombres al deporte es muy polémico.

En mi deporte hablamos de una disciplina femenina, algo que margina a los hombres. Todavía no les dejan competir en los Juegos Olímpicos, la prueba de que queda un largo camino.

Hay que soñar a lo grande, no podemos permitir que el miedo al fracaso impida ponernos retos importantes” concluía la flamante nadadora que con su carisma y personalidad traza un camino hacia las nuevas generaciones, comprobando a ciencia cierta que deporte y maternidad no son competencia entre sí.