UNA SITUACIÓN COMPROMETIDA
La difícil confesión de Amelia Bono que llenaría de intriga a Manuel Martos, el hijo de Raphael
Por más que lo intenta, la socialité no vive los mejores días.
Si hay alguien a la que el presente la tiene flipando en colores es a Amelia Bono. La socialité lleva varios días en el tapete de la conversación, luego de haber anunciado su separación de Manuel Martos, el hijo de Raphael.
La influencer, quien cumplió 40 años hace apenas unos días, se encuentra volviendo paulatinamente a su normalidad de reina de redes sociales. Instagram se convirtió en el refugio de sus alegrías y tristezas, y desde que le comentó al mundo que su matrimonio se había finiquitado, los ánimos no eran los mismos.
Sus 400.000 seguidores son como una familia virtual con quienes comparte todo. Allí fue donde escribió "Tras casi 15 años, Manuel y yo hemos tomado la difícil decisión de separarnos como pareja, pero seguiremos juntos y unidos toda la vida por nuestros 4 tesoros, que son lo más maravilloso que tenemos, y por todo lo que han significado estos años juntos. Damos gracias a la vida por todo lo que hemos vivido y también por todo lo que nos queda por vivir". Allí confesó su nuevo cambio de estado civil y también allí es donde intenta demostrar que está superando el momento más difícil de su vida.
La ex nuera del cantante de Linares está más activa que nunca. Presume looks veraniegos, momentos familiares con sus hijos y recientemente enseñó como vivió su cumpleaños, el cual lo celebró con sus cuatro hijos, algunos allegados y Manuel Martos. Aunque hoy decidió compartir el lado b de su aparente diversión.
Mediante una story, Amelia Bono le confesó a sus seguidores que últimamente le cuesta mucho entrenar. Un emoji de hartazgo acompaña una selfie donde podemos ver a la hija de José Bono con su ropa deportiva, pero con una cara de exhausta que no puede más.
Es lógico que le cuesten ciertas cosas. En pos de querer mejorar su situación anímica, se está cargando de actividades de todo tipo, pero debe entender que no puede con todo y que el cuerpo ante esto puede pasarle una mala jugada. ¡Ánimos, Amelia!. Pronto podrás seguir con ello.
