NO LO SOLTARÍA JAMÁS
El gran amor que mantuvo viva a Rocío Jurado aún en su peor momento
La más grande aguantó de todo por esta razón.
Rocío Jurado siempre demostró una enorme fortaleza desde muy joven, se trataba de una mujer bien plantada, segura de sí misma y que obraba como quería y bajo sus propias decisiones, algo que para su época ya era una completa revolución.
Nadie que la haya visto arriba de un escenario podría negar que Rocío Jurado daba clases de teatro en cada presentación suya, puesto que tenía paso firme y mucha seguridad en sus movimientos acompañados de su impresionante voz.
Para España entera fue un revuelo el día que la más grande se paró en frente a las cámaras de televisión desde su casa de Chipiona y comunicó que le habían descubierto un tumor y debía someterse a una intervención y posterior tratamiento contra el cáncer.
En ningún momento de aquel discurso le flaqueó la voz ni el espíritu, Rocío Jurado estaba decidida a hacerle frente a la enfermedad. Lo que más le costaba durante ese tiempo era la cantidad de compromisos musicales que debería rechazar por su salud.
A Rocío Jurado jamás le gustó hacer pausas tan largas ni suspender su música por motivo alguno, incluso nunca pensaba en retirarse puesto que, como ella misma afirmaba, su profesión era lo que la mantenía activa y lo que más amaba en el mundo.
Sería injusto retirarme ahora, cada día necesito cantar más. Además, llevo la música en mis entrañas. La música es lo que más amo en la vida.
Los hechos no hicieron más que confirmar sus palabras, solo los últimos meses de su enfermedad, cuando las fuerzas verdaderamente ya no le daban para más, es que Rocío Jurado dejó de aparecer y brindar conciertos, pero a pesar de pasaron 15 años desde que falleció, su público aún la recuerda.
