Digno de una diva

Los deseos de Raffaella Carrá que su familia se encargó de cumplir al pie de la letra

Ni ausente ha querido renunciar a su afán por controlarlo todo tal como quería.
martes, 6 de julio de 2021 · 10:22

En la hora más triste, siempre única e inimitable.

Decía Sergio Iapino, ex pareja de Raffaella Carrá. La diva italiana más divertida falleció ayer a causa de una enfermedad que su público desconocía por completo. El balde de agua fría llegó por horas de la mañana y desde ese momento, todo el mundo le ha dedicado un homenaje bailando una de sus candentes canciones.

Rodeada de lujos y reconocimiento, sus últimos días fueron transitados en la más absoluta simpleza. Es que Raffaella Carrá era un personaje arriba del escenario, con pelucas y colores alegres. Pero entre sus íntimos, era una mujer sencilla y apasionada de la vida que solo quería estar con los suyos y tener el más simple de los funerales.

Un ataúd sin barnizar donde pueda apreciarse el color de la madera y una urna igualmente de sencilla para que cobije sus restos incinerados. Esas fueron las peticiones de la diva que supo estar en lo más alto, rodeada de ostentaciones. También, pidió a una abogada feminista que leyera una carta a su familia una vez ella no esté según avientan algunos rumores. Solo Raffaella Carrá podría estar al pendiente de tantos detalles.

La noticia de su partida conmocionó al mundo entero, pero sobre todo a Italia, la tierra que la vio crecer. Nacida en Bolonia el 18 de junio de 1943, desde muy joven perfilaba para las grandes ligas de artistas. Tenía un talento único que la iluminaba con un semblante especial.

Para la revista The Guardian, Raffaella Carrá fue “estrella del pop italiano que enseñó a Europa la alegría del sexo”. En sus grandes éxitos como “Caliente, caliente”, o “Fiesta” o “0303” se albergan los recuerdos de lo que significó la italiana para las fiestas, los encuentros y la diversión.

Era la joya que el mundo europeo necesitaba sin siquiera saberlo. La calidad y el espectáculo de Raffaella trascendía la cuarta pared al mismo tiempo que se entretejía con la ficción, lo teatral y lo espectacular. Una artista que supo darle diversión y alegría a la zona pélvica de todos los europeos. Nunca te olvidaremos Raffaella Carrá.