Una confesión de Julio Iglesias movió los cimientos de la incredulidad

Julio Iglesias, seguramente, es uno de los artistas más enigmáticos y cautivantes de España. A lo largo de toda su vida musical vendió más de 300 millones de discos en 14 idiomas, asimismo, llegó a ganar 500 discos de platino y 1000 discos de oro, cifras que lo hicieron convertirse en un artista líder en ventas y lo llevaron a conseguir el récord absoluto.

Sin embargo, lo que más conmovió a sus fanáticos fue la idea que todos tenían de él y que con sus actuaciones lograron sembrar en el imaginario social. De hecho, el exfutbolista sabía lo que generaba en el público y decidió utilizarlo a su favor, una estrategia de Marketing que le dio sus frutos con el paso de los años.

Del compositor se dijo que estuvo hasta con más de tres mil mujeres, algo que él mismo no lo negó, pero quien sí le dio la espalda y desveló la verdad fue su examigo y exmánager, Alfredo Fraile: "No ha habido ni mil mujeres, en aquellos años dejamos correr ese mito porque funcionaba".

En esta línea de confesiones, se puede recordar una importante revelación de Julio Iglesias en el año 2018, meses antes de ganar un Premio Grammy: "Es lo último que me esperaba. Es un premio que me honra muchísimo y sí lo quiero recibir, sin falsas modestias, porque es un recuerdo imborrable en mi vida".

Pero no fue lo que más llamó la atención de los reporteros, por el contrario, los sentimientos que afectaban a Julio Iglesias después de haber sufrido el accidente de tránsito que adquirió trascendencia pública fue lo que más emocionó, pues nunca se había mostrado de esa manera, tan sensible, pero a la vez orgulloso de haber salido adelante.

He sido un guerrillero porque a mí todo me ha costado trabajo en la vida. Yo no tenía piernas, estaba muerto, y tenía el alma en vilo.