El día que Rocío Jurado sacó de su vida a las personas que más la amaban

La figura de Rocío Jurado hoy está muy presente en los medios por el documental de su hija Rocío Carrasco, desde allí ha confesado varios secretos de la familia y las verdaderas razones que la llevaron a alejarse de todos.

Rocío Jurado era la espina dorsal de todo su clan, cuando ella vivía se mantenían todos unidos, pero cuando falleció cada uno fue por su lado, hoy en día entendemos un poco más cuáles fueron las razones de esto.

Un 17 de septiembre de 2004 la más grande convocó a la prensa para una conferencia en los jardines de La Moraleja, había muchas especulaciones de lo que iba a decir, ella finalmente comunicó que debía enfrentarse a la lucha contra el cáncer que terminó por quitarle la vida unos meses después.

Ese mismo día, Rocío Jurado estaba preparando lo más importante que les dejaría a los suyos en el deceso, su testamento. Existían muchos cabos sueltos y se dice que lo que en realidad se leyó no fue lo primero que la cantante escribió, pero la legalidad de ella se regía por el Código Civil y no por la Ley Foral puesto que ella testaba como residente de Madrid. 

El testamento de Rocío Jurado no fue algo al azar, estaba medido y estudiado y se dividió en tres tercios. El tercio de “Legítima estricta” era para sus tres hijos, para Rocío Carrasco quedaba el "tercio de mejora", las razones eran por el hecho de que la primogénita se quedaría en ese momento sin padre ni madre por lo que quería protegerla.

Por otro lado, el "tercio de libre disposición " lo dividió entre sus hermanos Gloria y Amador Mohedano, una parte también para su sobrino Fernando, puesto que Rocío Jurado tenía una especial relación con él desde que nació. Por el lado de José Ortega Cano recibió el tercio de la mejora en “usufructo”  que se traduce en una posesión.