EL FLECHAZO DE CUPIDO

Los detalles jamás revelados del primer encuentro entre María Teresa Campos y Bigote Arrocet

La presentadora quedó impactada por la personalidad del argentino “de origen chileno”.
martes, 7 de septiembre de 2021 · 18:30

Nadie puede negar que María Teresa Campos y toda su familia se las ingenian una y otra vez para estar en el centro de la atención. Un pequeño imprevisto de la locutora provocó que se levantara de la tumba un tema que, honestamente, lo teníamos enterrado. Se ve que para ella no, pues al escuchar el nombre de Bigote Arrocet se le pone la piel de gallina.

Pero Bigote Arrocet también ha sido noticia gracias a esta resucitación. El humorista será parte del nuevo reality de Telecinco llamado “Secret Story”. Aunque bien sabemos que este importante fichaje ante una figura que estaba completamente desaparecida hace algunos meses atrás, tiene que ver con el conflicto que en la actualidad mantiene con la Campos.

Si bien el romance entre ellos duró cinco años, culminando de la peor forma en 2019, con el paso del tiempo la situación no mejoró del todo. En el presente tanto María Teresa Campos como Bigote Arrocet mantienen una relación muy áspera y tensa. Nada quedó de ese intenso amor.

En su momento eran una de las parejas más sonadas de la prensa rosa. Se conocieron en “QTTF”, el programa que conducía María Teresa Campos y que tuvo una tarde de invitado a Bigote Arrocet. El momento en el que se presentaron por primera vez quedó registrado y “Unplugged” de Telecinco se encargó de buscar el video exacto donde esas miradas se flecharon.

“Ha venido Don Edmundo, porque ahora se va a tener que quitar lo de Bigote porque está muy mal visto” fue su primera frase antes de abrir paso a quien sería su pareja sentimental. Entre bromas y bromas, poco a poco se fue asentando esa complicidad entre ellos.

Bigote Arrocet ¿te ha gustado la presentación? Qué bien estás siempre, estás estupendo” lo elogió María Teresa Campos, a lo que el humorista respondió “Dentro de lo que cabe”. El video archivo no tiene desperdicio. Así nació el amor y lo podemos ver, tal como podemos también apreciar la decadencia de esa relación que acabó de la forma más irresponsable posible, de ambas partes.