Jamás lo hablaron

La gloria de Raphael que se convirtió en una pesada cruz para Manuel Martos

Padre e hijo están en una encrucijada.
miércoles, 12 de enero de 2022 · 04:15

Raphael ya tenía un objetivo determinado tras el parón profesional producido por la crisis sanitaria: regresar a los escenarios por todo lo alto y así fue que lo hizo. El padre de Manuel Martos vivió un 2021 rodeado de éxitos y pretende que el 2022 sea igual de prometedor y prospero, en especial porque cumple las tan ansiadas bodas de oro con su esposa, la reconocida y prestigiosa periodista, Natalia Figueroa.

Raphael y la escritora dieron el “¡Sí, quiero!” el 14 de julio de 1972 en Venencia, fue una boda perfectamente planificada para que los periodistas no puedan invadir su privacidad, pues tan solo querían formalizar su amor con todas las de la ley en compañía de las personas que más los amaban: "Habíamos pensado en Versalles, pero cambiamos de idea, creyendo que además de un bello lugar, no muy lejos de Madrid, estaríamos a salvo de periodistas, no queríamos una boda con tumulto”, explicó en una oportunidad la comunicadora.

Si bien, el enlace y los posteriores festejos no pudieron ser algo que forme parte solamente de la índole privada, el amor que se profesaron a lo largo de este medio siglo significó un gran ejemplo para muchos de lo que debería ser el compañerismo y la unión entre un par de enamorados. Lo cierto es que para Manuel Martos este ideal de pareja se convirtió en una especie de maldición, pues le cuesta llenar los zapatos del cantante de Linares.

Sin ella, esta aventura no hubiera sido posible. Es la mejor mujer que se puede tener y la mejor madre para mis hijos. De ella me llamó la atención todo. Su aire. Ella siempre, desde que la conozco, ha tenido un aire muy especial.

Confesó Raphael. Asimismo, desveló que con su esposa puede comentar cualquier tema, puesto que, además de ser la luz de sus ojos, es también una gran conversadora. Lamentablemente, Manuel Martos y Amelia Bono no corrieron con la misma suerte de que su amor sea eterno, eso sí, son un buen ejemplo de cómo una expareja puede llevarse bien después de la separación.