Alejandro, el hijo de Chábeli Iglesias que busca escapar de la sombra de su abuelo, Julio Iglesias

Crecer dentro de la familia de Julio Iglesias, sea cual sea la rama de la que vengas, no es una tarea fácil: mucho menos si eres el primer nieto, Alejandro, el hijo de Chábeli Iglesias, lo sabe muy bien. Tal y como le pasó a su madre, el anuncio de su nacimiento ya era toda una noticia.

Sobre todo teniendo en cuenta las condiciones en las que nació Alejandro, era un bebé prematuro, a su madre le restaban varios meses para la fecha prevista de parto. El primogénito de Chábeli Iglesias nació un 14 de enero, pasó directo a una incubadora para sobrevivir y su madre tuvo que pasar unos tres meses hasta que se recuperó su salud nuevamente.

Sería imposible no compararlo un poco con Julio Iglesias en algunos casos, el joven hace un par de días cumplió 20 años y es absolutamente guapo, su tía Tamara Falcó disfruta mucho dándole consejos de moda y estilo para que sea aún más valorado entre la platea femenina que parece adorarlo tal y como lo hicieron en su momento con su abuelo.

De todas formas, Alejandro ha optado por una vida parecida a la de Chábeli Iglesias, prefiere mantenerse en el anonimato y alejado de las cámaras que siempre lo siguen por ser el nieto del cantante español. Lo que sí tiene en común con su abuelo es que decidió estudiar abogacía, sabemos que Julio Iglesias finalmente se recibió de esa misma carrera.

La herencia musical que Julio Iglesias le ha dejado a casi todos sus descendientes por lo visto no pasó por al lado de Alejandro que prefiere mantenerse siempre detrás de cámaras a pesar de ser uno de los predilectos de sus abuelos, la propia Isabel Preysler confirmó que aunque a ella no le gustan los favoritismos, se entiende el especial vínculo que ha logrado con él teniendo en cuenta la tensión que vivieron en su nacimiento.

Chábeli Iglesias fue una de las niñas más nombradas desde su nacimiento, era nada menos que la primogénita de Julio Iglesias; y, aunque por un tiempo le gustó bastante la fama, después abandonó completamente para vivir un poco más relajada desde su vivienda en Miami con su esposo, su hijo Alejandro y su hija menor Sofía.