NO LA PUEDE OLVIDAR

El amor del pasado de Santiago Pedraz que pondría en segundo lugar a Esther Doña

El letrado tiene ocupado su corazón desde mucho tiempo antes de conocer a la periodista.
lunes, 17 de enero de 2022 · 13:04

La pareja de Esther Doña con Santiago Pedraz, juez de la Audiencia Nacional de España, se convirtió en una de las más comentadas de la crónica rosa. La periodista publicaba su libro en memoria a Carlos Falcó, su reciente esposo fallecido en el año 2020, mientras sostenía la mano de una nueva pareja. Ante los ojos ajenos, esto causó muchas críticas.

Pero Esther Doña está acostumbradísima a eso, pues siempre se la ha cuestionado por sus elecciones amorosas, incluso cuando estaba junto a Carlos Falcó. Si bien compartieron muchos años juntos, hasta el fallecimiento del Marqués, la periodista nunca fue bien recibida por la familia y cercanos. Ni siquiera la invitaron al funeral como ejemplo.

Pero nada de eso impidió que Esther Doña no diera vuelta la página. Contra todas las críticas se aventuró en un nuevo romance. Claro que esta historia de amor no estaría exenta de polémica, ya que Santiago Pedraz dejó a su compañera sentimental Sylvia Córdoba para embarcarse en su nuevo idilio, actitud que no sentó nada bien.

Sylvia, ni lenta ni perezosa, tomó las riendas de esta situación y se apersonó en Lecturas para relatar con voz propia su versión de los hechos, donde reveló que hasta planes de bodas tenían. Nada de esto sirvió para aplacar las mariposas que revoloteaban alrededor del amor entre Esther y Pedraz.

Salvo por un pequeño detalle. Últimamente Santiago Pedraz estuvo usando su cuenta de Instagram para publicar algunos de sus cuadros. Hace una semana publicó una de sus obras de arte, la cual rotuló como “La impostura del universo interior”. Debajo de esa imagen, su exesposa Paula Arenas Martín Abril, con quien el pintor compartió más de 20 años:

Acceder a lo profundo. Atreverse a entrar en los “adentros” de uno. Y no solo salir ileso, sino mucho más en paz. Impostura y espiritualidad son incompatibles. Toda la razón.

Escribía en completa confianza bajo los comentarios. Esther Doña claro que hizo lo suyo y también revalorizó el trabajo de su compañero en su red social, agradeciéndole por haberle regalado uno de sus cuadros. Esta naturalidad con la que ambas se toman la presencia de la otra causa algo de extrañamiento.