El bollo dulce ideal para compartir el Día de Reyes y guardar para el resto del año

Hay dulces o preparaciones que solo se hacen una vez al año sin explicación alguna, porque son manjares que se podrían disfrutar siempre, uno de ellos es el típico roscón de reyes, que lo preparamos por esta época y después nunca más, pero lo cierto es que puedes hacerlo en porciones individuales y sin el clásico agujero en el centro, sino más bien como unos bollos dulces y disfrutarlos en cualquier momento, hasta te recomendamos poner en el frezzer la masa cruda y descongelar cuando los desees a tu antojo.

INGREDIENTES:

Harina de fuerza 520 gr.

Leche 250 ml.

Levadura fresca de panadería 20 gr.

Azúcar (y más para decorar) 75 gr.

Sal 5 gr.

Huevo 2

Ralladura de naranja 0.5

Agua de azahar (opcional) o ron 5 ml.

Mantequilla sin sal sin sal atemperada 75 gr.

Frutas confitadas (opcional)

Almendra laminada o en granillo (opcional)

PREPARACIÓN:

Lo primero que haremos en esta receta de bollos dulces por el Día de Reyes será calentar la leche ligeramente hasta dejarla tibia. Desmenuzar encima la levadura fresca, añadir una pizca de azúcar y 2 cucharadas de harina; mezclamos todo y tapamos con un paño para que fermente 30 minutos.

Por otro lado en el azúcar colocamos la ralladura de naranja. Colocar la harina de fuerza en un recipiente grande, mezclar con la sal y formar un hueco.

Añadimos después en ese agujero el fermento, el huevo ligeramente batido, el azúcar y el azahar, y mezclamos.

Agregamos de a poco la matequilla pomada y la integramos despacio. Tapar con un paño y dejar reposar 15-20 minutos.

Degasificamos después y amasamos de manera enérgica añadiendo un poco de harina si fuera muy necesario, aunque lo mejor es que quede húmeda.

Formar una bola, colocar en un recipiente engrasado y tapar. Dejar levar un par de horas, hasta que doble su tamaño.

Dividimos la masa en 10 porciones formando bollos, dejamos leudar nuevamente hasta que doblen su tamaño.

Pintarlos ligeramente con huevo batido y por encima pegarles las frutas confitadas y las almendras.

Hornear 10 minutos, bajar la temperatura a 175 ºC. y continuar horneando hasta cumplir unos 30 minutos, estarán listos nuestros bollos dulces para el Día de Reyes, incluso podemos congelar la masa y tenerlos siempre a disposición.