Las semanas van pasando pero aún les queda mucha tormenta para disipar a Tamara Falcó e Íñigo Onieva. Iban a casarse, anunciaron su compromiso con bombos y platillos y nada más unas horas después circularon unas imágenes de él besando a otra mujer que rompieron por completo la relación.

Tamara Falcó podía salir días más tarde con la cara en alto asegurando que se había sentido muy traicionada aunque igualmente se sentía bastante afectada. Íñigo Onieva, por su parte, prefería alejarse por completo de la presión de la prensa y se refugiaba en la casa familiar de su madre, Carolina Molas, que luego se declaraba bastante cansada de que los periodistas estuvieran haciendo guardia todo el día en las puertas de su hogar.

Claramente, Carolina Molas había estado muy preocupada por su hijo aunque en el fondo sabía que la Marquesa de Griñón estaba en su derecho y ella le guardaba un especial cariño. Hoy en día Íñigo Onieva está intentando recuperar poco a poco la normalidad de su vida y sus allegados afirmaron que hasta intentó recomponer la relación con quien fuera su prometida aunque no hubo caso.

Una opinión directa

Carolina Molas fue quien acompañó a Íñigo Onieva a un viaje a Turquía hace un par de semanas. Ahora el empresario ya retomó sus actividades y solo se pronuncia con algún comunicado en redes sociales cuando es necesario. Este domingo se ha vuelto a refugiar en su madre, se dirigieron a un buen restaurante en Madrid y luego los reporteros de Europa Press encontraron a su progenitora que se ha mostrado mucho más sonriente.

Lo primero que le consultaron a Carolina Molas era sobre el estado de Íñigo Onieva, ella respondió que ya está mucho mejor y no se olvidó de mencionar también a Tamara Falcó dejándole un buen deseo. Le guarda un gran cariño a quien fue la pareja de su hijo y quiere lo mejor para ella a pesar de que no va a haber reconciliación.

La hija de Isabel Preysler y Carolina Molas siempre se llevaron de maravilla, se las pudo ver juntas en varios eventos mientras duraba su relación con Íñigo Onieva, pero cuando todo esto explotó Tamara Falcó decidió cortar todas las relaciones con la familia también; aunque los respeta es momento de cuidar su propia integridad.

Tamara Falcó se llevó una enorme decepción

Antes de conocer a Íñigo Onieva, Tamara Falcó estaba muy concentrada en la iglesia católica y hasta se planteaba en ser religiosa, todo cambió después del empresario y cuando salió a la luz su infidelidad no pudo evitar sentirse muy decepcionada.