La Reina Letizia está viviendo unos días de relajamiento gracias al puente de diciembre. Según lo expuesto por diversos medios de comunicación, la esposa del Rey Felipe decidió aprovechar estas mini vacaciones para realizar compras en reconocidos locales comerciales de Madrid, sin embargo, que no tenga actos oficiales no se traduce en que no esté en el centro de la polémica.

Su Majestad siempre es un tema de análisis, pues se convirtió en una de las figuras principales y representativas de la Monarquía moderna de Europa. Indudablemente, su fuerte carácter y temperamento que, en muchas ocasiones, fueron criticados por los especialistas en Realeza, habrían sido los pilares en los que se apoyó para mirar al frente y construir su propio camino.

Hoy, la Reina Letizia es una de las mejores consejeras del Rey de España y la encargada de educar, nada más y nada menos que a la futura Reina del país. En pos de concretar sus objetivos, la Consorte debió tomar decisiones, algunas muy severas y que, indirectamente afectaron a ciertos miembros del linaje, uno de ellos fue Iñaki Urdangarin, el exmarido de la Infanta Cristina.

La Reina Letizia y la determinación que la alejó más de Iñaki Urdangarin 

Es de público conocimiento que la madre de la Princesa Leonor y de la Infanta Sofía siempre tuvo mayor conexión con Jaime de Marichalar, -exmarido de la Infanta Elena-, que con Iñaki Urdangarin, como si fuera un presagio la Aristócrata eligió mantener cierta distancia con el exolímpico, distancia que, por supuesto, se acrecentó más tras que estallara por los aires el polémico caso Noós.

A partir de ese momento, la Reina Letizia tomó la decisión de no llevar la sortija con la que el Rey Felipe le pidió matrimonio, no es para menos teniendo en cuenta los antecedentes de esta joya. De acuerdo a la información obtenida por los profesionales de la comunicación, fue el mismísimo Iñaki Urdangarin quien compró este anillo, incluso, se encargó personalmente de retirarlo.

El exdeportista, por orden del Jefe de estado, tenía que retirar dicha pieza de la reconocida joyería Suárez del Paseo de Gracia de Barcelona, ya que el Rey había elegido la joya por catálogo. Al llegar al lugar, el excuñado de Felipe VI abonó el precio del anillo de compromiso de la Consorte de España con la tarjeta de Noós, por tal motivo, y para mantener su intachable reputación la Reina Letizia prefiere no lucirlo.

La elección de las joyas de la Reina Letizia 

El anillo de bodas de las Reinas Consortes es de gran importancia en las Familias Reales, debido a que concede status y cierta jerarquía, no obstante, para la Reina Letizia lucir una alhaja no sería relevante, tanto es así que también prescinde de su joya de bodas y en reemplazo utiliza una pieza de plata que le regalaron sus hijas.