RUPTURA AMOROSA

Rocío Flores rompe en mil pedazos el corazón de Manuel Bedmar

Cada uno por su lado dijo un mal hablado.
jueves, 24 de febrero de 2022 · 10:00

Es oficial, Rocío Flores y Manuel Bedmar rompieron su relación de más de seis años. Los motivos girarían en varios argumentos que pronto pasaremos a detallar. Pero algo es seguro en toda esta confusión: ninguno de los dos piensa dar brazo a torcer. La relación se terminó.

El último año ha sido muy movilizante para Rocío Flores en varios sentidos. Su madre, Rocío Carrasco, le dio bastante protagonismo. Aún así la Influencer supo conquistar terreno en lo laboral por cuenta propia. Las puertas de trabajo se están abriendo y eso requiere, necesariamente, un cambio de perspectiva.

Manuel Bedmar estaría en otra página de la vida. Acostumbrado a una rutina más tranquila, prefiere Málaga a Madrid. Convengamos que ha estado en pareja con una persona muy mediática. Aún así ha conservado intacto su bajo perfil.

Estos cambios de ritmo en sus vidas habría sido el principal motivo de distanciamiento de la pareja. Mientras que Rocío Flores pasaba la mayor parte del tiempo en Madrid, Manuel Bedmar hacía su rutina en Málaga. Las diferencias no solo eran emocionales ni profesionales, sino también físicas.

La clave estuvo siempre delante de nuestras narices. Las redes sociales, bendito espejo de la sociedad, dejaba entrever que entre “Ro Trece” y su chico no andaban las cosas bien. Ya no subían historias juntos, como lo era habitual. Aunque quien sí insistía en las demostraciones de cariño era Manuel Bedmar.

Ninguno de los dos se ha pronunciado aún, pero tampoco han desmentido la información de “Semana”, misma revista que hizo pública la relación de Antonio David Flores con Marta Riesco. La evolución de Rocío Flores está a la vista en su propia cuenta de Instagram. El cambio de inocente niña tierna a toda una mujer, fuerte, transparente y ambiciosa se deja ver.

No es la primera pareja que se separa por estos motivos. Cosas nuevas e interesantes se vienen para ellos, brotados de juventud y talento. Eso sí, habrá que ver cómo queda la repartición de bienes, pues tienen una casa comprada en común que todavía contiene los residuos del “nidito de amor”.