Pros y contras

El gran beneficio que Jaime de Marichalar obtuvo al desmarcarse de la Familia Real

El exduque de Lugo celebra sus 59 años agradecido.
jueves, 7 de abril de 2022 · 02:45

Jaime Rafael Ramos María de Marichalar y Sáenz de Tejada más conocido como Jaime de Marichalar cumple hoy 7 de abril 59 años edad y lo hace en un momento único de su vida que, probablemente, amerite todo tipo de festejos. Si bien, aún no trascendió dónde soplará las velitas sería un hecho que el pamplonés cuenta los minutos para celebrar como a él más le gusta: rodeado de la alta sociedad en uno los costosísimos lugares de la capital madrileña.

Cabe destacar que los dos años anteriores el exmarido de la Infanta Elena solo se limitó a compartir una agradable velada en compañía de las personas más cercanas por motivo de la crisis sanitaria mundial. Por lo tanto, este 2022 sería una buena ocasión para reunir a todo su círculo de la "jet set española". Justamente, este sería uno de los beneficios que obtuvo al desmarcarse de la Familia Real.

Desde hace 13 años que Jaime de Marichalar se sentiría aliviado sin temor al qué dirán.

Según la información reportada por los medios de comunicación, al exyerno del Rey Juan Carlos le habría gustado demasiado la vida nocturna, pero al formar parte de una de las dinastías más importantes del mundo sus momentos de ocio y disfrute se habrían visto totalmente suspendidos, pues los periodistas y paparazis siempre perseguían sus pasos en busca de una primicia.

Cabe destacar que Jaime de Marichalar y la Infanta Elena contrajeron matrimonio el 18 de marzo de 1995 en Altar Mayor de la Catedral de Sevilla y se divorciaron 12 años después con dos hijos en común: Froilán y Victoria Federica. En noviembre del año 2007 anunciaron desde la Casa Real el "cese temporal de la convivencia matrimonial" y, finalmente, el 25 de noviembre de 2009 informaron el divorcio de manera oficial.

Antes de la boda, el Rey Juan Carlos habría investigado a Jaime de Marichalar para cerciorarse de sus verdaderas intenciones.

La especialista en Realeza, Pilar Eyre, desveló que el heredero de los Condes de Ripalda y la hermana de la Infanta Cristina tenían intenciones de separarse ya en el año 2001, pero como Victoria Federica era muy pequeña y Jaime de Marichalar se encontraba bajo tratamiento médico tras sufrir un ictus determinaron postergar sus deseos y darse una segunda oportunidad.

Como ya se mencionó en líneas anteriores la desvinculación con la Familia Real española lo posicionó gratamente en un discreto y segundo plano, así como también le concedió la libertad plena de poder tomar decisiones personales sin ser cuestionado por los Borbones o por los periodistas de quienes supo escaparse muy bien mientras trasnochaba de manera constante.