Jesús Mariñas no se guarda nada y confiesa lo que todos sospechaban sobre José Ortega Cano

A todos nos ha causado impresión ver salir a José Ortega Cano del hospital tras realizarse una intervención estética. Sus cejas estaban muy debilitadas y el diestro no tuvo mejor idea que injertarse cabello de la nuca para suplir el faltante. Las imágenes impactaron a todos y llegaron a manos de Jesús Mariñas, el tertuliano que se encuentra ingresado en el hospital pero que no pierde oportunidad alguna para lanzar su “verdad piadosa”.

Jesús Mariñas es un personaje muy importante dentro de la prensa del corazón y hace poco resurgió de las cenizas, presentando en distintos diarios algunas notas apodadas bajo la paradoja de “Verdades piadosas”. Lo cierto es que de piadosa no tiene nada, pues, en las pocas líneas que el tertuliano dedica a cada personaje, lanza un campo minado colmado de sensibles dardos. Hoy le tocó el turno al viudo de Rocío Jurado.

Según Jesús Mariñas, la nueva imagen de José Ortega Cano causa incluso hasta “cachondeo”. Forma parte de una estrategia para disimular sus eternos problemas familiares con Ana María Aldón, según él. “No es nada guapo. Y con esta operación perderá personalidad”.

El periodista cayó en algo prácticamente inevitable, pues siempre se ha comparado con José Ortega Cano en diferentes etapas de su vida, sobre todo cuando estaba casado con Rocío Jurado. La Mas Grande también ha sido objeto de comparación con la nueva esposa del diestro, Ana María Aldón, una salvedad que ni Mariñas evita caer.

“Lo recuerdo cuando se casó con Rocío Jurado. Tan torero, mejor persona. Fue una boda multitudinaria, de aquellas de las de antes que suponían todo un espectáculo. Cosa que no se ha repetido con la actual mujer, Ana María Aldón. Ya hecha y rehecha una estrella televisiva y de los photocalls previo pago”, rescata el periodista para el medio “La Razón”. El cruce de retoques estéticos entre Rocío Jurado y la colaboradora televisiva dejan expuesto a José Ortega Cano, quien también ha entrado en la misma lógica.

Una columna de opinión no es más que su definición. La visión subjetiva de Jesús Mariñas sobre el nuevo retoque estético de José Ortega Cano no hace más que profundizar en un problema grave de nuestra sociedad: opinar sobre los cuerpos ajenos, una carta que parece de libre mercancía, pero que, en realidad, deberíamos erradicar. Lo mismo ocurrió con Justina Bustos cuando acudió a “El Hormiguero”. La opinión innecesaria sobre lo que los demás deciden hacer con su corporalidad atrasa. Pero Jesús Mariñas no comprendería para nada esta nueva tendencia.