PARA EL OLVIDO
Así fue la peor noche en la historia de "MasterChef"
Los participantes fracasaron a lo grande en la sexta gala.Parecía ser una emisión cargada de exquisiteces, destrezas culinarias y sabores sorprendentes, pero acabó siendo todo lo contrario. El huevo y la pasta le complicaron la vida a los concursantes de "MasterChef", quienes sufrieron - y lloraron - cada una de las pruebas.
El programa dio inicio con el clásico desafío de relevos por equipos, formados para la ocasión por Luismi, Yannick, María Lo y Vero; Teresa, Claudia, Julia y Adrián; y el invitado Josie, Jokin, Patricia y David. Todos tenían que realizar por turnos, y de forma sucesiva, unos huevos benedictinos con salmón ahumado, una quiche, un suflé de queso emmental y un flan de huevo. Los participantes se ordenaron por filas y no podían dar el relevo al compañero que le seguía hasta que no terminasen su elaboración.
Luismi fue una verdadera piedra en el zapato para sus compañeros y tardó tres intentos y más de una hora en servir unos huevos, mientras que María Lo falló en un suflé de queso emmental: tuvo que hacerlo seis veces a raíz de su perfeccionismo, por lo que empleó nada menos que hora y media. "Toda la vida cargando con ese peso tan grande de la perfección. Soy incapaz de quererme" reconoció entre lágrimas y sus compañeros la consolaron con un abrazo fraterno.
Pero lo peor llegaría después y de la mano del postre. David, que nunca había hecho un flan, se olvidó de los huevos: de entrada solo metió al horno leche y una infusión. Verónica, tampoco supo hacerlo y con Adrián, sucedió exactamente lo mismo. Rotundo fracaso.
Tras tres horas y 45 minutos, Pepe Rodríguez sentenció enojado: "¡Prueba cancelada. No ha ocurrido nunca, nunca!". Y Jordi Cruz lo apoyó. "Prueba bochornosa. No sabéis hacer un simple flan, qué horror". Verónica bajó de su atalaya e hizo un mea culpa: "¡Ostras! Sé hacer un atún ahumado en no sé que caldo de falso caviar de café, pero no sabes hacer un flan. Como mi abuela vea esto me va a matar". Bochorno en "MasterChef".
Si bien no hubo equipo ganador, Patricia y Yannik fueron los mejores y los chefs repartieron cuatro delantales negros a Luismi, María Lo, David y Adrián, aunque les dieron un consuelo: si lo hacían muy bien en la prueba de exteriores se los quitarían.
La segunda instancia evaluativa tuvo lugar en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), donde los aspirantes debían servir a comensales muy especiales: todos los participantes de las ediciones anteriores de "MasterChef", dos de los cuales asumieron la capitanía: Maribel, de la primera edición, y Ofelia, de la novena.
Los concursantes debían elaborar un menú degustación de seis tapas a base de productos locales. En líneas generales el conjunto azul estuvo bien, pero la crema de langostino no sabía como su ingrediente principal, y el buñuelo tampoco era del todo rico. Por su parte, el equipo rojo hizo tres propuestas notables, con puntos sobresalientes como las tortillas de camarones de Luismi y los tartar de Claudia. Antes emitir el veredicto global, los chefs retiraron los delantales negros a María Lo y Luismi, pero se los mantuvieron a David y Adrián.
Así, Patricia, Teresa, María Lo, Julia, Jokin, Adrián y David cayeron en la prueba de eliminación, en la que tenían que elaborar un plato de pasta fresca en media hora. No obstante y como es costumbre en el concurso de cocina más famoso, eso no era todo: luego de que acabaran esa tarea, les dieron media hora extra para elaborar otro plato de pasta fresca con los ingredientes sobrantes.
Luego de mucho dirimirlo, los jueces decidieron que la expulsión fuese doble: Teresa y Patricia tuvieron que entregar la chaquetilla blanca en una noche en la que platos que parecían ser simples y sencillos, demostraron que en "MasterChef" nada puede darse por sentado.