El Rey Juan Carlos (85 años) y el Rey Felipe (55 años), finalmente, decidieron acercar posturas. Si bien hasta el día de hoy padre e hijo son como el agua y el aceite, la salud del Rey Emérito habría llevado a que el Jefe de Estado mantenga un diálogo a puertas cerradas con Pedro Sánchez para analizar su futuro con relación a las restricciones impuestas desde el palacio de Moncloa.

"Sánchez sigue enrocado que tiene que pedir perdón, dar explicaciones y en vetar que se aloje en Zarzuela, su hogar desde hace 60 años", aseguraron las fuentes oficiales hace pocos meses. No obstante, Su Majestad no tendría intenciones de dar el brazo a torcer debido a que, tras el último encuentro con su progenitor en el funeral de Constantino de Grecia, pudo observar que los años ya le pesan al Rey Juan Carlos.

Una fecha marcada para el Rey Juan Carlos y el Rey Felipe

A pesar de que el Rey Felipe jamás coincidió con el comportamiento del Rey Juan Carlos, de hecho, cuando asumió al trono aseguró que estaba dispuesto a realizar un lavado de cara a la institución, el afecto que se tienen es innegable y justamente en esta época la relación padre e hijo les traería cierta nostalgia, puesto que el 1 de abril se cumplen 30 años de la ausencia física de Juan de Borbón y Battenberg.

Los restos mortales del jefe de la Casa Real española entre 1941 y 1977 reposan en el Panteón de Reyes del Monasterio de El Escorial con la inscripción "Juan III, conde de Barcelona". Aunque fue descendiente directo de un Rey y pretendiente al trono de España, jamás pudo reinar, aunque sí se encargó de preservar el trono y de cuidarlo con uñas y dientes.

El 19 de julio de 1969 el Rey Juan Carlos fue nombrado como sucesor a título de Rey por Francisco Franco y desplazó de esta manera a su progenitor, un hecho que fue traumático para ambos, pero que se añade a una seguidilla de sucesos desafortunados en la historia familiar. El 14 de mayo de 1977, el abuelo del Rey Felipe renunció a todos sus derechos dinásticos en una sencilla ceremonia que tuvo lugar en el palacio de la Zarzuela.

Dos meses antes de su cumpleaños número 80, Juan de Borbón y Battenberg falleció en la Clínica de Navarra por un cáncer de laringe que le habían diagnosticado tiempo atrás. Su adiós fue en compañía de sus descendientes, que en ningún momento se separaron de él. Junto a su lecho estaban el Rey Emérito, las Infantas Pilar y Margot, el doctor Zurita y la Reina Sofía.

Un gran sentido del humor

Los que conocieron al abuelo del Rey Felipe destacan que era un hombre amable, atento y con un gran sentido del deber, como del humor. Al igual que el Rey Juan Carlos, Juan de Borbón y Battenberg tenía una gran afición por los deportes acuáticos y por las mujeres.