Melania Trump vuelve a sonreír tras recuperar lo que perdió por ser Primera Dama

El pasado 19 de enero vimos públicamente por última vez a Melania Trump, cuando dio su discurso de despedida como Primera Dama de los Estados Unidos de América. "Sean apasionados en todo lo que hagan. Pero siempre recuerden que la violencia nunca es la solución, y nunca estará justificada" fueron sus últimas palabras en dicha función.

Desde entonces, poco hemos sabido sobre Melania. Podríamos decir que la esposa del polémico Donald Trump se encuentra en su mejor momento, lejos de la constante atención de los medios de comunicación, quienes tenían siempre en la mira a la pareja, principalmente a su marido cuando era el mandamás de uno de los países más poderosos.

Uno de los primeros rumores que se ha corrido fue el que hablaría de un supuesto enojo de la pareja con los medios respecto al manejo de la figura de Melania Trump. Desde CNN se comentó que Donald se ofuscó porque su esposa no tiene la misma trascendencia e imagen positiva de otras ex Primeras Damas como Laura Bush y Michelle Obama.

Lo que sí podemos asegurar es que ya alejada del plano gubernamental, la exmodelo eslovena descansa junto a su marido en su mansión en Mar-a-Lago, donde retomó sus viejos hábitos como dedicarse a su figura, descansar y reunirse con sus padres, Viktor y Amalija Knavs, para almorzar o cenar en familia.

Si hay algo que no podemos evitar al hablar de Melania Trump es mencionar su estilo. En su desempeño como Primera Dama, Melania tuvo que afrontar la negativa de varias marcas para vestirla, por lo que se refugió en la firma italiana Dolce & Gabbana. Su marca de confianza volvió a ser noticia por ella tras su reaparición.

En las últimas horas, pudimos ver a la exmodelo luciendo un despampanante vestido negro ceñido con escote cuadrado acompañado por una hilera de perlas que se aleja notoriamente del estilo que veníamos viendo en ella cuando su esposo era Presidente. Esta prenda reafirma el retorno a su normalidad.

El detalle de las perlas llama la atención en Melania Trump ya que no solo condice con su estilo, también es una referencia en idealistas antagónicas a la eslovena. El sencillo pero clásico accesorio es uno de los predilectos en la imagen de figuras demócratas como Hillary Clinton y la actual Vicepresidenta Kamala Harris.