Puchero andaluz tradicional, el platillo ideal para pasar los días fríos

El puchero andaluz tradicional es una de las tantas recetas que hay de las distintas formas que existen de elaborar platos de guisantes de legumbres al estilo español; en esta ocasión la elegida será al cocido andaluz, por supuesto que con su típica pringá, garbanzos, sopa de fideos o arroz, pues todo va a depender de los gustos personales.

Esta receta clásica está basada, principalmente, en la manera en que se cocinan las diferentes carnes, legumbres y verduras, puesto que será en un tiempo mayor a tres horas, para así lograr de esta manera obtener un delicioso e inigualable sabor. Pero, si se cuenta con poco tiempo y con una olla a exprés en tan solo 45 minutos estará listo el puchero andaluz tradicional.

Para esta comida se necesitarán: medio kilo de garbanzos ya cocinados, medio kilo de morcilla, medio kilo de pollo, hueso de rodilla de ternera, una punta de jamón, dos morcillas de cebolla, dos chorizos, dos patatas, un puerro, dos zanahorias, fideos o arroz para la sopa, apio, un hueso de espinazo de cerdo salado, sal y pimienta a gusto.

Elaboración del puchero andaluz tradicional: colocar las legumbres en su malla de cocción para agregar las verduras ya limpias y cortadas en pequeños trozos. A continuación, preparar las carnes: primero se deben limpiar una a una para llevarlas a una olla exprés, en la cual se debe colocar la malla con los garbanzos y las verduras, cubrir de agua. Cocinar durante 45 minutos.

Transcurrido el tiempo, apagar el fuego esperar que la presión baje para poder destapar la olla, se saca la malla y las carnes inmediatamente, este es un paso a tener en cuenta para lograr una comida sana y saludable, ya que permitirá eliminar el excedente de grasa. Agregar más agua si es necesario y, finalmente, fideo o arroz.

Ahora se debe preparar la pringá que consiste simplemente en retirar las diferentes carnes y desmenuzarlas. Con las preparaciones listas, procedemos a servir el puchero andaluz tradicional. Se coloca en un plato por un lado, las legumbres con las verduras junto al caldo obtenido y, por otro la pringá. ¡Y listo! A disfrutar de una comida sana y deliciosa.