El constante miedo con el que convive Víctor Manuel y que nadie podría creer

Víctor Manuel ya lleva casi seis décadas siendo un gran artista español, representó al país en varias oportunidades y se ganó el corazón de todos los fieles seguidores de su arte, no simplemente por la dulzura de sus interpretaciones, sino que es un acérrimo defensor de los Derechos Humanos y un constante opositor de las injusticias sociales.

El esposo de Ana Belén comenzó su camino a la fama desde que era tan solo un niño, tanto es así, que a los diez años empezó a tocar la armónica y a los 12 logró componer su primera canción "Tendré tu amor". A paso firme y sin prisa se presentó en todos los concursos musicales de su tierra natal, hasta que optó por trasladarse a Madrid en 1964 para perfeccionar su técnica musical.

Lo que terminó por condecorar al cantante como una joven promesa en la industria, fueron sus presentaciones constantes de cada domingo en el programa "La nueva ola musical". Para 1965 ya tenía grabados varios temas que le pondrían el moño a su futuro profesional colmado de esperanzas y mucha ilusión.

Tras una buena década a nivel profesional, los problemas se hicieron presentes en la vida de Víctor Manuel, él mismo lo confesó en el libro de su propia autoría, "Antes de que sea tarde: Memorias descosidas", publicado en el año 2015. En sus escritos desvela que desde 1973 hasta 1978 se trató de una "travesía por el desierto, donde tenía mucha voluntad, pero unos discos pésimos".

Sin embargo, esto no fue lo que más llamó la atención de los reporteros durante la presentación de su obra, por el contrario, todos los presentes tenían la duda de los motivos que habían impulsado a Víctor Manuel a escribir sus memorias a los 68 años, pues para muchos era muy temprano. No obstante, tenía su especial razón.

Yo estoy obsesionado con la pérdida de memoria desde que vi a mi madre con tantos años en esa situación (Alzheimer) y, lógicamente, piensas que te puede pasar, aunque no tengas síntomas muy graves.