Las 5 veces en las que Rocío Jurado estuvo a punto de renunciar a lo que más amaba en el mundo

Si hablamos de artistas fuertes y únicas en España, no podemos dejar de pensar en Rocío Jurado, para ella la vida no fue fácil pero nunca permitió que nada la tirara abajo, incluso cuando se enteró que padecía cáncer decidió pelear hasta las últimas consecuencias y no rendirse nunca aunque la enfermedad la hizo añicos.

Para nadie que tenga la fama que tenía Rocío Jurado puede ser fácil cumplir con todos los compromisos laborales y a eso sumarle hacerse cargo de una familia y tratar de darle las mejores enseñanzas a una hija; la misma Rocío Carrasco expresó alguna vez que de niña no veía mucho a su madre, pero que la perdona por todo pues sabe que estaba dando lo mejor de sí misma para triunfar.

Es por este y otros tantos motivos de presiones y estrés del ambiente musical que la más grande quiso tirar la toalla en más de una oportunidad, ella misma confesó que fueron 5 veces en las que pensó en retirarse. "He tenido más de cinco 'pájaras' del estilo de las de Perico Delgado, pero no he tenido la suficiente fuerza de voluntad para seguir adelante con la idea", expresó.

En aquel momento Rocío Jurado estaba casada con Pedro Carrasco, era muy joven y sabía que le quedaban demasiadas cosas por vivir por lo que no podía retirarse, además de que su futuro era prometedor y ya la gente disfrutaba demasiado de su música, en todo este asunto su esposo y padre de Rocío Carrasco significaba un gran apoyo y fuerza para seguir.

Además, aún tengo muchas cosas por hacer y sería muy injusta conmigo misma si abandono después de haber luchado tanto y cuando estoy arriba. Ahora, eso sí, no me voy a hacer pesada. Me retiraré a tiempo. En ese sentido tengo un buen ejemplo en Pedro, que lo imitaré

El tiempo pasó y todos sabemos que a pesar de que Rocío Jurado indicó alguna vez que pensaba retirarse antes de que todo estuviera perdido, un golpe del destino no le permitió llegar a ser una anciana cantante como seguro la hubiéramos visto, el cáncer obligó a su salida cuanto antes.

Sin embargo, Rocío Jurado jamás renunció a la música, la llevaba en la sangre y se trataba de su gran pasión, por lo que hasta cuando el cuerpo no le daba para más decidió subirse al escenario unos meses antes de fallecer para brindarle a su público una despedida como se merecía.