La ceguera que no le permitía a Rocío Jurado separarse de José Ortega Cano

Estaría de más decir a estas alturas que el documental de Rocío Carrasco puso todo patas para arriba, sobre todo en lo que respecta al clan que formó Rocío Jurado. En el pasado todos parecían ser una familia fuerte y unida, pero con el fallecimiento de la cantante en 2006 las cosas se vinieron abajo.

Por un lado, estaba el hecho de que la propia Rocío Carrasco se alejó de todos ellos, durante casi 20 años no supimos lo que a ciencia cierta pensaba la hija de la más grande, pero con el estreno de "Rocío, contar la verdad para seguir viva" se han descubierto muchos secretos; por ejemplo el hecho de que a la hija de Rocío Jurado no le cerraba del todo la relación que llevaba su madre con José Ortega Cano.

Desde que Rocío Jurado falleció que el amor entre la artista y el torero se ha convertido casi en un mito o leyenda. José Ortega Cano se ha encargado de que esto sea así, pero ahora han salido muchos testigos a explicar que antes de enterarse de su enfermedad, la más grande y su esposo venían teniendo varios problemas de convivencia.

Incluso el chofer de Rocío Jurado y su secretaria, que además fue una gran confidente, expresaron que ella no se fiaba de su marido y hasta había mandado a seguir a José Ortega Cano porque sospechaba de infidelidades. A todos los testimonios, se sumó también Jesús Mariñas, el periodista explicó que fue la propia cantante quien le comunicó su interés por separarse.

Justamente en el "Deluxe", Jesús Mariñas se sometió al polígrafo para saber si decía la verdad y le fue imposible escapar de sus palabras, de hecho Rocío Jurado pensaba en separarse de Ortega Cano, pero luego vino todo el conflicto de su enfermedad, en donde lo necesitó más que nunca.