El grave problema al que se enfrentó Freddie Mercury en sus inicios con Queen

Muchos consideran que la esencia de Queen fue siempre Freddie Mercury, otros piensan que todos en conjunto eran estupendos y si cualquiera de ellos faltaba pasaría lo mismo, es por eso que a pesar de que ahora la banda se sigue considerando activa, desde que falleció el músico su repercusión en el mundo entero ha bajado considerablemente.

Lo cierto es que Freddie Mercury era un artista por donde se lo mirara, excéntrico, siempre alejado de la realidad que ven los ojos, y seguro de sus propias decisiones musicales pese a todo. Cuando se conocieron él se unió a Queen sin saber que juntos marcarían la historia musical y recorrerían todos los rincones del planeta.

Pero la verdad es que si bien todos los miembros de la banda eran unos genios musicales, el vocalista de Queen no siempre estaba de acuerdo con el resto y hasta incluso Brian May, el guitarrista, ha coincidido que en una etapa de su historia sintió que Freddie estaba "fuera de control" justo en el momento en el que empezaban a grabar Demos.

Entre los años 1971 y 1972, Freddie Mercury no estaba de acuerdo con nada que propusieran, su enfoque para hacer la grabación no era aceptable e insistía en atacar las canciones desde un punto de vista mejorado, empeñado en un cambio radical. Brian May coincidió en que el cantante fue "Un hombre que se hizo a sí mismo"; además de recalcar: "Fue al estudio cuando entramos por primera vez, y había estado cantando con nosotros en directo; habíamos estado ensayando y escribiendo. Y estaba bastante fuera de control, tengo que decirlo. Incluso él mismo lo sabía. Corría gritando y posando y lo que sea, pero las voces estaban por todos lados".

Entró y e hicimos cuatro pistas, pero Freddie dijo: ‘No voy a aceptar esto, no es lo suficientemente bueno. No quiero sonar así’. Y lo intentó una y otra vez, y trabajó en ello intentando amoldarse como cantante

Lo que Brian May sí valora, es que gracias a aquel empeño casi de lunático de Freddie Mercury, más adelante cualquiera de sus temas se convertían en magia, no podría olvidar "Bohemian Rhapsody" tal vez la insignia de Queen, se publicó en 1975 y para entonces el músico ya era "un artista fenomenal". "Probablemente hayas escuchado aislada la pista de acompañamiento y es impecable, ¿no es así?", explicó el guitarrista.

Justamente, más adelante Freddie Mercury no necesitaba de edición, su perfecto oído y dedicación lo habían hecho superar cualquiera de los estudios, la banda podía sonar a la perfección desde cualquier lugar, como el propio Brian May indicó: "No hay truco. El propio Freddie era como un metrónomo. Tenía mordiente, la forma en que Freddie golpeaba el piano. Era increíble tocar con él".