Luego de varios ingresos hospitalarios, la vida le vuelve a sonreír a Cayetano Martínez de Irujo

Después de haber atravesado unos meses complicados que preferiría olvidar tras haber ingresado en varias oportunidades al hospital por problemas de salud, Cayetano Martínez de Irujo finalmente pudo recuperarse de la obstrucción intestinal por la que tuvo que ser intervenido de urgencia en mayo pasado y ahora parece que no quiere desaprovechar ni un segundo de su vida.

En estos días se lo vio disfrutar al máximo de una de sus grandes pasiones: los toros. El hijo de la Duquesa de Alba estuvo presente hace poco en la plaza de los toros de La Maestranza para ver a José Manzanares. En esta oportunidad no estuvo acompañado de su pareja Bárbara con quien comparte sus días hace más de cuatro años. 

Durante la jornada, Cayetano Martínez de Irujo se mostró con muy buen aspecto, sobre todo, los reporteros que se encontraban en el lugar, destacaron la felicidad del hijo de Hijo de Cayetana Fitz-James Stuart que en todo momento lució una gran sonrisa de oreja a oreja.

Y no es para menos, ya que el jinete español de equitación vuelve a hacer una vida normal y tranquila luego de haber sido intervenido quirúrgicamente en 13 oportunidades por problemas intestinales. Pero esa no es la única buena noticia que nos dio el amante de los toros. Semanas atrás, nos enterábamos que había conseguido librarse de uno de sus mayores dolores de cabeza. 

Después de varias operaciones inmobiliarias sin éxito, Cayetano Martínez de Irujo por fin pudo vender la casa ubicada en la plaza de San Miguel, una propiedad que había recuperado tras el fallecimiento de su nana, Margarita Gallarda, a fines de octubre de 2015. El conde de Salvatierra vendió este inmueble por 500 mil euros. 

Según publicó El Español, la venta se concretó el pasado 24 de junio. Quien se hizo acreedor de esta propiedad fue un empresario peruano que se dedica a la consultoría y que reside en España pero que realiza todo tipo de negocios en distintos países, por lo que se trataría de una persona con un buen caudal económico.