El legado de Manolo Santana que causaría un tormento a Alba Santana

El pasado 11 de diciembre el extenista, empresario y máximo referente del tenis español, Manolo Santana, fallecía por causa de una enfermedad que atentaba contra su salud hace mucho tiempo. La única persona a su lado en esos momentos fue su última esposa. Ni siquiera Alba Santana y sus hermanos pudieron darle el último adiós.

Hace tiempo que Manolo Santana había perdido relación con sus hijos. Muchos rumores decían que Claudia Rodríguez, la colombiana que contrajo matrimonio por última vez con el tenista, controlaba todos los aspectos de su vida, desde lo económico hasta lo afectivo.

Fue por eso que a Alba Santana y a sus hermanos les ha costado trabajo tan solo poder comunicarse con él, hablarle y tender un puente de reconciliación. Se rumoreaba que cada vez que uno de sus hijos quería contactarse con el tenista, las llamadas eran rechazadas.

No las podría haber negado Manolo Santana, pues se encontraba enfermo y muy débil, tanto física como espiritualmente. Por eso delegaba en Claudia estos aspectos importantes de su vida. Ella nunca tuvo una buena relación con Alba, Ximena, Beatriz y Manuel, los cuatro herederos del as del tenis.

Aunque, “heredero” es una forma de decir, pues en el testamento Claudia Rodríguez figura como la única destinataria de todos los bienes de Manolo Santana. Ni siquiera aparece el nombre de Alba Santana, su primogénita. Tras esta situación, los hermanos se han unido para intentar recuperar algunos objetos de su padre. Por el momento, siguen esperando.

Una fuente reveló al medio “Informalia” que Claudia Rodríguez se niega a contestarle las llamadas y que no piensa entregar a los hijos de su exesposo ninguno de los enseres del tenista. Alba y sus hermanos estarían intentando por buenas hablar con ella, pero reciben la negativa constante. La colombiana no solo se apoderó de los bienes materiales, sino también de la historia personal y afectiva de Manolo Santana.

Además, esta misma fuente citada aportó un dato muy revelador. Los intereses empresariales de la viuda de Manolo Santana no estarían siendo los mismos que cuando el tenista estaba con vida. Ambiciosa y con un carácter sumamente desafiante, parece ser que no tiene intenciones de sostener el Club que a su esposo tanto le costó mantener:

El club no pasa por sus mejores momentos, necesitaría hacer una gran reforma, pero Claudia no tiene intención de gastarse el dinero que modernizaría las instalaciones. Su marido era el reclamo perfecto para atraer socios, pero su muerte supuso un hándicap para captar nuevos afiliados.

“La concesión finaliza su contrato en el 2026 y, aquí, todos estamos convencidos de que Claudia no tiene la idea de renovarlo”. Alba Santana y sus hermanos no encuentran una solución a su alcance para poder resolver este problema. Solo el tiempo dirá como se desarrolla este polémico final.