Joaquín Sabina no tiene más remedio que reconocer lo que tanto temían sus hijas

• Joaquín Sabina rompe el pacto de silencio al confirmar cómo es su relación con sus hijas
• Carmela Juliana Martínez y Rocío Martínez Oliart acompañaron al cantante en el concierto
• Víctor Manuel pone a temblar a Jimena Coronado al señalar la responsabilidad de Joaquín Sabina

Joaquín Sabina (74 años) se encuentra transitando una etapa de su vida en la que, a pesar de disfrutar de un gran presente musical gracias a su gira “Contra todo pronóstico”, en las últimas semanas sus problemas de salud terminaron siendo un verdadero quebradero de cabeza. Tanto es así que tuvo que disculparse en reiteradas oportunidades por cancelar un concierto muy importante en Puebla, México. 

Como era de esperar, en sus siguientes presentaciones en México, el oriundo de Úbeda reiteró sus disculpas por verse obligado a cancelar su presentación. No solo por esta razón, sino también por no brindar un concierto a la altura de la circunstancia, ya que su voz presentaba algunas fallas que fueron evidentes para sus fanáticos. 

El día que Joaquín Sabina lamentó no brindar un concierto a la altura de las expectativas de su público

“Llevamos ya 47 conciertos en varios continentes y me faltaba el día de hoy para comprobar algo que ya sé desde hace muchos años: que en el escenario también se sufre. Me está costando sacar esta voz de lija y eso me avergüenza”, señaló Joaquín Sabina en el Auditorio Nacional ante sus fieles seguidores, quienes fueron testigos de cómo es la verdadera relación entre el cantante y sus hijas. 

No hay nada que les guste más en el mundo que ver a su padre hacer el ridículo. 

Joaquín Sabina señaló que entre su público se encontraba Carmela Juliana Martínez y Rocío Martínez Oliart, sus dos hijas fruto de su relación con Isabel Oliart. “No hay nada que les guste más en el mundo que ver a su padre hacer el ridículo”, expresó el cantante, quien con estas palabras dejó al descubierto que sus descendientes lo acompañan en cada uno de sus pasos y son conscientes de su esfuerzo por brindar el mejor de los espectáculos, a pesar de no haberse recuperado por completo de su problema de garganta, lo cual lo avergonzaba.

De hecho, la pareja de Jimena Coronado también lamentó la presencia de los novios de sus dos hijas el día que comprobó que en el escenario se sufre. Sin embargo, dejó en claro que no es perfecto y que este inconveniente en el Auditorio Nacional servirá para que le pierdan el respeto de una vez por todas. No quedan dudas que Joaquín Sabina recordará para toda la eternidad su última presentación en México, el sitio “donde más problemas tuve con la voz, pero también, donde la complicidad del público me ha emocionado más”. 

Fama por mérito propio

Las hijas de Joaquín Sabina nunca estuvieron interesadas en ser reconocidas por su padre, es por ello que el cantante desveló el motivo por el que sus descendientes llevan su primer apellido y el de su ex: "Un día les propuse si querían cambiarse el apellido, porque al fin y al cabo Sabina es el que yo me he hecho y me dijeron: Ni hablar".