Rafa Nadal
Mery Perelló con un nudo en el corazón al escuchar a Rafa Nadal abatido: "Tengo y he tenido miedo"
El tenista está listo para regresar a las pistas, pero, igualmente, no puede negar que siente nervios y algo de miedo.Este último año fue definitivamente difícil para Rafa Nadal (37 años), quien tuvo que tomar la decisión de abandonar las pistas obligado por una lesión que lo llevaría a operarse de la cadera y posteriormente recuperarse por largos meses. En todo ese tiempo, se refugió en Mery Perelló (35 años) y en su hijo que recientemente cumplió su primer año.
El proceso de recuperación y el hecho de mantenerse alejado del deporte que tanto lo hace feliz tampoco fue una tarea fácil. Desde el primer momento, tuvo claro que no deseaba verse obligado a retirarse de manera apresurada, iba a trabajar duro para regresar y estar a tope para una próxima competencia.
La semana pasada, anunció que regresará a la competición oficial en el ATP 250 de Brisbane (Australia), que se disputa la primera semana de enero. Por supuesto, tiene muchos miedos por lo que pueda pasar y, su esposa, Mery Perelló lo sabe mejor que nadie. Este mismo lunes declaró que: "Después de un año sin competir, lo que más preocupa no es la cadera sino todo lo demás".
Mery Perelló debe apoyar más que nunca a Rafa Nadal
A través de un vídeo publicado en sus redes sociales, Rafa Nadal anunció que está muy preocupado por algunas cuestiones personales más allá de lo físico: "Tengo y he tenido miedo de anunciar las cosas porque al final es un año sin competir y es una operación de cadera, pero lo que más me preocupa no es la cadera sino todo lo demás".
El deportista está seguro y cuenta con todo el apoyo de Mery Perelló, una de las personas que estuvo a su lado en este difícil momento: "Creo que estoy preparado y confío y espero que las cosas vayan bien y que me dé la oportunidad de disfrutar en la pista otra vez".
Rafa es consciente de que pasó mucho tiempo desde que dejó las pistas y hay cosas que podrían llegar a salirle mal, para eso ya está listo: "Al final, es mucho tiempo. Espero volver a sentir esos nervios, esa ilusión, esos miedos, esas dudas. Espero de mí no esperar nada. Espero tener la capacidad de no exigirme lo que me he exigido durante toda mi carrera. Estoy en una época diferente, una situación y un terreno inexplorado. Durante toda mi vida me he exigido al máximo y espero ser capaz de no hacerlo", confirmó.
Lo tiene claro
Rafa Nadal sabe que no todo depende de sus emociones, a veces también lo físico juega un papel importante: "Tengo que aceptar que las cosas van a ser muy difíciles al comienzo. Tengo que darme el tiempo necesario y perdonarme que las cosas vayan mal al comienzo, que es una posibilidad muy grande. Pero saber que puede haber un futuro no muy lejano en que las cosas puedan cambiar si mantengo la ilusión, el espíritu de trabajo y el físico me responde", concluyó.