Infanta Cristina
Lo único que Iñaki Urdangarin jamás podrá obtener de la Infanta Cristina
Una condena.Iñaki Urdangarin (55 años) y la Infanta Cristina (57 años) tendrán el final que nunca imaginaron. Solo falta menos de un mes para que firmen el ansiado divorcio. Le pondrán punto y final a su historia de amor, que se prolongó por más de 20 años. Y aunque el ex duque de Palma recibirá un jugoso contrato de separación nunca podrá obtener lo que sí conquistó Jaime de Marichalar al separarse de la Infanta Elena.
Esta ruptura ha sido tan mediática que incluyó infidelidad, años en prisión para el ex duque de Palma, humillaciones y también exigencias además de que la justicia se posicionó de un lado de la balanza cuando estalló el caso Nóos, del que se sospecha que estarían enterados tanto el Rey Juan Carlos como la Infanta Cristina.

La Infanta Cristina supo poner límites a Iñaki
Y aunque el ex jugador de balonmano se quede con una pensión mensual, una millonaria indemnización y otros privilegios que saldrían del bolsillo de la hermana del Rey Felipe. A partir del momento que realicen la firma del divorcio, será una relación nula.
La Infanta Cristina no piensa volver a entablar algún tipo de relación más allá de la que considere formal, puesto que Iñaki Urdangarin es el padre de sus cuatro hijos. El sentimiento de venganza de su exmarido no compagina con otra forma de correspondencia. Ella solo quiere cumplir con todas sus peticiones, a pesar de sentirse humillada y pasar la página.

Todo lo contrario
Y es que hay motivos para contrastar entre la separación de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin y su hermana mayor. Para empezar, no existe ningún punto de comparación con lo que habría sido el divorcio de la Infanta Elena. En la relación de la hermana mayor del Rey Felipe con Jaime de Marichalar siempre reinó la discreción. Cuando se divorciaron en 2009, todo pasó bajo cuerdas. Él jamás le exigió algún contrato, pero su vida cambió radicalmente al tener amigos en común. Esos contactos hoy lo dejan bien parado y no le va mal, pues gracias a la Infanta Elena hoy cobra más de un millón de euros al año.

Algo que no le pasará ni en sueños a Iñaki Urdangarin una vez que se separe de la Infanta Cristina. Él desea renovar su imagen y conseguir un trabajo digno; sin embargo, eso quedará lejos, ya que los amigos y personas en común se posicionan del lado de la hermana del Rey Felipe y además dependerá de todo lo que decida ella.
Por ahora, él vive con su novia en un apartamento alquilado y no tiene ofertas firmes en lo laboral. Por eso ha sido caprichoso y piensa seguir adelante para que el divorcio se realice lo más pronto posible y bajo sus condiciones.