Un altar en su hogar

El único hombre que manchó el honor de Rocío Jurado, pero que le fue fiel hasta el último día

"La Chipionera" no podría creerlo de continuar con vida.
martes, 23 de noviembre de 2021 · 02:45

No se trata de una historia de amor y tragedia de William Shakespeare, tampoco de una película romántica de Hollywood, es la vida de Rocío Jurado quien fue marcada por el afecto de un hombre que terminó dejándola subsumida en la más profunda tristeza y desolación. Ni Pedro Carrasco ni José Ortega Cano, se animaron a lastimar el corazón de su amada, pero Enrique García Vernetta sí lo hizo y en varias oportunidades.

La relación de Rocío Jurado y el que fuera su representante comenzó en los años 60, la artista ya era bastante famosa y captaba la atención de todos los españoles con su apabullante arte escénico. Durante una presentación en Valencia, el reconocido hijo de los dueños de la perfumería de Las Barcas de la capital de Turia no podía sacar su mirada estridente de la coplera, quien, por supuesto, se había sentido atraída por la figura de aquel joven buen mozo.

Al poco tiempo se pusieron de novios, aunque muchos periodistas de la prensa rosa de aquellas épocas aseguraban que "el amor que sentía la madre de Rocío Carrasco no era el mismo que su pareja le tenía". De hecho, su vínculo afectivo no fue para nada bien visto por su familia, pues para esos tiempos era necesario contraer matrimonio para llevar una relación romántica tan apasionante.

Los periodistas nos hacíamos los tontos ante esa situación. La ventaja que tenían para mantener una relación así fue que cuando se convirtió en su mánager viajaban mucho juntos pese a que él vivía en Valencia y ella en Madrid.

Desveló hace algún tiempo Manuel Román para el portal Vanitatis. Los tortolitos estuvieron juntos por, aproximadamente, 12 años, pero el fin era inevitable. La progenitora de Rocío Jurado exigía compromiso y Vernetta era todo un "don Juan", sin más "La Chipionera" debió alejarse con su "corazón partió" cantaría Alejandro Sanz, aunque, muchos profesionales de los medios de comunicación confirmaron que la intérprete de "Qué no daría yo" habría intentado huir con su amado.

Aquello habría sido un escándalo, pero en los momentos más bajos de su primer matrimonio ella volvió a acudir a Vernetta.

Sostenían los tertulianos refiriéndose a que Rocío Jurado continuaba enamorada de su exnovio mientras ya estaba casada con Pedro Carrasco. Si bien, quedan muchas dudas al respecto de cómo continuó su situación hay una sola certeza y es que el valenciano siempre tuvo su casa llena de fotografías de la artista, o por lo menos, así lo destacaba Pilar Eyre cuando el exrepresentante acudía a diversos platós a vociferar que "él fue el hombre a quien más amó la cantante": "Tiene su casa llena de fotos de Rocío, la llora todos los días sin necesidad de que sea su aniversario y dice que si alguna revista se interesa, él estaría dispuesto a contar la historia de ese gran amor", escribía en su blog de revista Lecturas la especialista en Realeza.

Otras Noticias