Hace poco tiempo se cumplió un año del regreso de Charlène de Mónaco al Principado de Mónaco y con ello terminaba una de las etapas más complicadas que atravesó la nadadora. Su delicado estado de salud la había obligado a permanecer más tiempo de lo estipulado en Sudáfrica, lejos de sus hijos y del Príncipe Alberto.

Una vez instalada en el Principado, se decidió que la deportista olímpica iniciaría un tratamiento en una exclusiva clínica de Suiza donde se centrarían en su recuperación, ya que habían sido meses muy complicados lejos de los suyos. 

Si bien durante años la esposa del Príncipe Alberto fue llamada "la Princesa triste" por su rostro siempre apenado, serio y ausente. La nacida en Zimbabue sorprendió a todos tras recibir el alta de la clínica suiza y es que su sola presencia dejaba en evidencia que todo lo malo había quedado en el pasado. Ahora es una mujer completamente renovada, con una sonrisa siempre dibujada en su rostro.

El Príncipe Alberto termina con las especulaciones

En su última aparición pública, el Príncipe Alberto habló sin rodeos de la salud de su esposa. En pocas palabras, aseguró que aún es largo el camino que tiene que transitar la nadadora, es por ello que desde el Principado aún no se exige que tome grandes compromisos, pues entienden que está transitando una recuperación larga.

Hay que dejarle su tiempo.

Al parecer, la salud de Charlène de Mónaco no está al 100% y esto se ve reflejado en su cansancio, en un agotamiento muy grande el que siente cada vez que toma muchos compromisos. Si bien se muestran muy optimistas, está  claro que es un tratamiento que requiere no solo de tiempo, sino también de paciencia.

Charlène de Mónaco concentrada de lleno en su recuperación

La salud de Charlène de Mónaco se convirtió sin lugar a dudas en uno de los temas más importantes para la familia, se respetan muchos los tiempos y procesos de este tratamiento esperando que los resultados sean los mejores y en el tiempo más próximo.