Este pasado sábado, 10 de diciembre, Charlène de Mónaco y el Príncipe Alberto celebraron en la más estricta intimidad el cumpleaños número ocho de sus gemelos, los príncipes Jacques y Gabriella, quienes han supuesto con sus respectivas llegadas al mundo el ancla de "estabilidad y esperanza" para el futuro de la Familia Real Monegasca.

Si bien los niños nacieron una década después de que su padre tomara las riendas de la Casa Grimaldi, tras la partida física de Raniero III de Mónaco, es ahora cuando medios como la revista Mujer Hoy dejan entrever que con el correr de los años "se han convertido en una atracción más" del nutrido clan. Aunque cargarían con el peso de una supuesta "herencia envenenada" por parte de sus progenitores. ¡OMG!

¿Por qué los príncipes Jacques y Gabriella, hijos de Charlène de Mónaco y el Príncipe Alberto, recibirían tal "herencia envenenada"?

Según la información que maneja el medio citado, Sus Altezas Serenísimas no terminan de salir de "la zona de recuperación", es decir, el matrimonio real continúa bajo el foco mediático y su situación privada es tan "incierta", que es casi imposible descifrar si todo esto no afectará a los pequeños del Palacio Principesco de Mónaco en un corto o largo plazo.

La incertidumbre que rodea las relaciones familiares de los príncipes es una constante reciente en el clan Grimaldi y, desafortunadamente, la peor herencia que recibirán los niños.

Tras estas palabras, el magacín explicó a sus lectores que el marqués de Baux y su hermanita, la condesa de Carladès, "han vivido en carne propia uno de los dramas royal más misteriosos de este siglo". Es decir, pese a haber cumplido recién sus ocho añitos de vida, han tenido que cargar con la ausencia de su madre por casi un año tras su delicado estado de salud.

Todo esto, sin contar que la relación entre la Princesa Consorte de Mónaco y la tía de los chicos, Carolina de Mónaco, no es muy buena. Aunque fue esta última quien ayudó a su hermano Alberto II a cuidar de ellos y ejercer de "Primera Dama" sustituta, mientras su cuñada se recuperaba.

Es imposible calcular cómo el dolor de la infelicidad de Charlène va a marcar a sus hijos. La inestabilidad familiar es la herencia envenenada que pasa de generación en generación en los Grimaldi, un clan muy afectado por los dramas y los enfrentamientos.

De esta manera, el periódico en cuestión deja entrever que los descendientes de Charlène de Mónaco y el Príncipe Alberto, los príncipes Jacques y Gabriella, tendrían que hacer frente en un futuro a "una carga extra" en sus vidas. ¡Sí, a pesar de que aún les queda tiempo por delante y estén "libre de preocupaciones"!

¿Quién nació primero?

Como dato no menor, te contamos que Jacques Honoré Rainier y Gabriella Thérèse Mari (sus nombres de pila) nacieron el 10 de diciembre de 2014 mediante una cesárea programada. En los medios de la época, trascendió que la exnadadora olímpica dio a luz a sus gemelos con dos minutos de diferencia. Primero nació ella y, dos minutos más tarde, él. Este último, el que se convertirá en el sucesor de la Corona Monegasca.