Manjar si los hay
Callos a la gallega, una receta barata y deliciosa para las noches frías
Un platillo tradicional que nos invita a reunirnos en la mesa.En esta oportunidad llevamos al alcance de tus manos una de las recetas más simple y barata en lo que se refiere a la cocina. Los callos a la gallega es un plato muy tradicional y suele reunir a toda la familia en la mesa, pues nadie se quiere perder este manjar.
La receta de callos a la gallega solo requiere de una preparación previa, y un tiempo de cocción algo largo, pero sin lugar a dudas, es un platillo que lo disfrutaras a pleno en las noches frías que no trae este otoño.
Ingredientes:
- Garbanzos 500 g
- Callos de ternera 500 g
- Pata de ternera 500 g
- Chorizo tierno 2
- Panceta 140 g
- Cebolla 1
- Dientes de ajo 5
- Aceite de oliva virgen extra 25 ml
- Pimentón dulce 15 g
- Guindilla 1
- Mezcla especias para callos al gusto
- Laurel 1
- Sal al gusto
Preparación:
Para comenzar con esta receta de callos a la gallega vamos a tomar un recipiente y pondremos los callos con agua, un poco de limón y los dejamos a remojo en la nevera. En paralelo, continuamos con este paso a paso simple y barato, hacemos lo mismo con la pata de ternera troceada y los garbanzos a remojo en agua templada con sal.
Al día siguiente, podremos continuar con esta receta muy barata, tomamos una olla, colocamos los callos, los trozos de pata de ternera y los cubrimos con agua, dejándolos cocer por al menos unos 40 minutos. Acto seguido añadimos la panceta en dados, los chorizos enteros, el aceite y las verduras, por último, se agregan las guindillas y los garbanzos que se echan cuando el agua llegó al hervor para una cocción perfecta.
Finalmente, en este punto de la receta solo nos resta darle nuestro toque en lo que respecta a la sazón. Lo ideal es que se cocine por al menos dos horas y media, hasta que la carne y las legumbres estén a punto. Solo nos resta disfrutar de los callos a la gallega, un plato increíble. Si esta receta te pareció fácil, te invitamos a seguir el paso a paso de los repápalos extremeños. ¡Buen provecho!