Faltan horas para el gran estreno de "Tamara Falcó: La Marquesa", la gran apuesta de Komodo Studios para Netflix que, aparentemente, será todo un suceso, al menos para los españoles y para aquellos que son fanáticos de ahondar en la vida privada de los famosos. A través de los diferentes capítulos, se podrá conocer a fondo el pasado, el presente y los anhelos que tiene por cumplir la novia de Íñigo Onieva, aunque estos no coincidan demasiado con lo que espera Isabel Preysler para su hija.

La serie para la plataforma de streaming se concentrará en un objetivo que la diseñadora tiene muy claro: la apertura de un restaurante en su sitio preferido, la mansión que heredó tras el fallecimiento de su padre, El Rincón: "Mi verdadera pasión la descubrí en las cocinas, por eso, me he propuesto abrir un restaurante", una decisión que a la exmujer de Julio Iglesias no le parece del todo acertada.

Por si fuera poco, tengo que convencer a mi madre de que puedo hacerlo.

La decisión de Tamara Falcó que Isabel Preysler no avalaría

Si bien en los episodios de la producción audiovisual la Marquesa de Griñón ha tenido que enfrentar ciertos obstáculos para la concreción de su meta, también ha tenido tiempo para visitar una de sus ciudades preferidas: Nueva York. Inesperadamente, Tamara Falcó consideró oportuno ver vestidos de novia en la Gran Manzana y fue esto lo que llamó la atención de Isabel Preysler, quien, al parecer, considera que es muy pronto para que su descendiente dé el siguiente paso con Íñigo Onieva.

No me asustes. No seas boba. Todavía estás en la edad del pavo.

Asegura Isabel Preysler ante la posibilidad de que Tamara Falcó y el diseñador de coches pasen por el altar; sin embargo, se trata de un hecho que, por lo pronto, no sucederá o al menos así lo dejó en evidencia la colaboradora televisiva: "El que se va a asustar es Íñigo cuando vea esto. Estoy en plan psicópata viendo vestidos de novia. Cuando le diga a Íñigo que he estado viendo trajes de novia, lo que espero es que no malinterprete la reacción de mi madre. No es por él, es por el concepto. Mi madre lo que no quiere es perderme, ella cree que voy a volver a su casa. No es que no me quiera ver feliz, pero quiere que esté con ella".