Rubén Sánchez Montesinos desvela el dato desconocido sobre su relación con Enrique del Pozo

El pasado domingo 15 de mayo, Rubén Sánchez Montesinos se enfrentó contra Ainhoa Cantalapiedra en el duelo de eliminación de "Supervivientes" y quedó expulsado definitivamente. Al borde de las lágrimas, el exparticipante se despidió del concurso y aprovechó la ocasión para dedicarle unas sentidas palabras a su gran amor, Enrique del Pozo.

Tras su gran experiencia en la nueva entrega de "Supervivientes", Rubén Sánchez Montesinos le concedió una entrevista exclusiva a Ion Aramendi y dejó en claro que "regresa de Honduras con las ideas más claras sobre su vida". Al parecer, su estadía en el reality show le cambió por completo su vida y le sirvió para reflexionar sobre su romance con Enrique del Pozo.

Frente a cámara, el deportista aseguró que vuelve a su rutina diaria con "ganas de cuidar aún más su relación con su gran amor", quien le defendió en los plató de televisión. Con la sinceridad que lo caracteriza, Rubén Sánchez admitió públicamente que su romance con Enrique se encuentra sumamente "consolidado y unido".

Estoy orgulloso de él, resulta que es un hombre que me lo demostró en el año de convivencia. Esa persona me quiere y ha defendido lo indefendible en este plató y eso es el premio que me llevó, el amor de Enrique del Pozo.

Aunque muchos no lo creían, la relación sentimental del deportista y el colaborador de televisión salió aún más fortalecida gracias a "Supervivientes", el reality show que puso a prueba a la pareja. A pesar de los comentarios negativos en contra de Rubén, Enrique se encargó de limpiar la imagen del hombre más importante de su vida.

Sin dudas, el reencuentro entre los novios fue efusivo y sumamente emocionante, luego de meses sin verse. En directo, Rubén y Enrique no dudaron en darse besos, abrazos y se dedicaron palabras cariñosas. Al parecer, el exparticipante de "Supervivientes" notó mucho la ausencia de su amor, especialmente en la distancia y en los momentos de debilidad: “Estoy feliz, contento, agradecido y muy enamorado. ¡Feliz!”.