Ayer fue una de las emisiones más emocionantes de "Sálvame", pues sus colaboradores debieron enfrentarse a "el camino de las emociones", así como lo hicieron los participantes de "Supervivientes". Carmen Borrego fue quien más sorprendió durante su momento de sinceridad, ya que la salud de María Teresa Campos fue uno de los temas centrales de su confesión.

Este significativo camino estaba dividido en escalones que tenían tópicos bastante reveladores: el éxito, el fracaso, el miedo y la familia fueron los temas centrales sobre los cuales la hermana de Terelu Campos debió revelarse. Sobre el éxito, Carmen Borrego es consciente de que un día puede estar en lo más alto y otro puede caer a lo más bajo, puesto que nada es para siempre.

Yo pertenezco a una familia de éxito y el éxito no siempre ha llegado a buen puerto.

En cuanto al fracaso, la colaboradora de Telecinco fue muy elocuente y honesta al revelar que tras constantes obstáculos en su profesión, tuvo la capacidad de poder salir adelante con la cabeza en alto. Tanto es así que, actualmente, no le afecta ser tertuliana cuando en el pasado fue directora: "Para nada. Una de las mejores decisiones que tomé en mi vida es estar aquí con todos mis compañeros y todo el público que ve este programa".

Carmen Borrego se quiebra al pensar en el presente de María Teresa Campos

Sin duda, el momento más conmovedor y sentimental llegó cuando Carmen Borrego habló de la salud de María Teresa Campos. Cabe destacar que la longeva presentadora tiene 81 años, pero todavía carga con todo el entusiasmo y las ganas de continuar trabajando en lo que más ama: los medios de comunicación. Lamentablemente, pese a sus deseos, las oportunidades son muy escasas, al menos por ahora.

Cuando las madres se hacen mayores nos necesitan. Me necesita más ella a mí que yo a ella. Tengo una madre maravillosa y en estos momentos lo más importante es devolverle todo el amor que nos ha dado.

En el escalón del miedo, la malagueña manifestó el temor que siente a los cambios repentinos y sobre todo al no poder contar en su vida con las personas a quienes más ama, como por ejemplo María Teresa Campos: "Tengo miedo a poder perder personas importantes, a los cambios y a no estar a la altura. Cuando uno recibe muchas cosas, cuando en su vida ha habido una persona que te lo ha dado todo, estoy hablando de mi madre, nos corresponde a todos estar a la altura de lo que ella nos ha dado, que ha sido todo".